Bloomberg — Los responsables de la política monetaria de la Reserva Federal acordaron el mes pasado que la política debería seguir siendo restrictiva durante algún tiempo para seguir enfriando la inflación, al tiempo que señalaron que los riesgos se habían vuelto más equilibrados.
“Los participantes en general consideraron que, con la postura de la política monetaria en territorio restrictivo, los riesgos para el logro de los objetivos del comité se habían vuelto más debatibles”, según las minutas de la reunión de septiembre, divulgadas el miércoles en Washington.
“Todos los participantes” coincidieron en que el comité estaba en condiciones de “proceder con cuidado” y que las decisiones políticas dependerían de los datos y tomarían en cuenta “el balance de riesgos”.
Las minutas muestran que los funcionarios de la Fed se acercan a una perspectiva política simétrica, donde el riesgo de un ajuste excesivo y una recesión se contrapone a una inflación prolongada por encima del 2%.
En la reunión del mes pasado, los funcionarios de la Reserva Federal mantuvieron su tasa de interés de referencia en el rango de 5,25-5,5%, y señalaron que las tasas se mantendrían más altas durante más tiempo de lo previsto luego de un aumento más este año.
Desde entonces, un aumento en los rendimientos de los bonos del Tesoro a largo plazo han llevado a algunos responsables de la política monetaria a sugerir que podrían aplazar otro aumento cuando se reúnan del 31 de octubre al 1 de noviembre.
Después de que se publicaron las minutas, los rendimientos de los bonos del Tesoro a dos años, sensibles a la política de la Reserva Federal, y el dólar recortaron las ganancias del día, mientras que el índice S&P 500 recortó pérdidas.
Debate sobre tasas
Las minutas señalaron que “una mayoría” de los funcionarios de la Reserva Federal consideraban que un aumento adicional de las tasas “sería probablemente apropiado” para ayudar a frenar la demanda y acercar la inflación a su objetivo del 2% en los próximos dos años, mientras que “algunos” dijeron que “no estarían justificados más alzas”.
En las previsiones publicadas el mes pasado, 12 de 19 funcionarios proyectaron un aumento más este año, mientras que la estimación mediana mostró que esperaban menos recortes de tasas en 2024 y 2025.
“En general, los participantes señalaron que era importante equilibrar el riesgo de un endurecimiento excesivo con el riesgo de un endurecimiento insuficiente”, se lee en las minutas.
La estimación de un pico de tasa más alto, unida a un ritmo más lento de reducciones en los próximos dos años, hizo tambalearse a los mercados de renta fija en las últimas tres semanas. Los rendimientos de los bonos estadounidenses a 10 años subieron hasta 40 puntos básicos desde la reunión del 20 de septiembre hasta el lunes, mientras que los diferenciales del crédito corporativo se ampliaron y las condiciones financieras se endurecieron.
El rápido aumento de los costos de endeudamiento parece haber sorprendido a algunos funcionarios del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), quienes sugirieron que podrían volver a mantener las tasas sin cambios cuando los funcionarios se reúnan en tres semanas.
Ruta de política
El vicepresidente de la Reserva Federal, Philip Jefferson, dijo el lunes en una conferencia que “seguiría siendo consciente del endurecimiento de las condiciones financieras a través del aumento de los rendimientos de los bonos” al evaluar “el camino futuro de la política”. Por su parte, la presidenta de la Reserva Federal de Dallas, Lorie Logan, dijo el mismo día que los rendimientos más elevados podrían reducir la necesidad de nuevos aumentos de tasa.
El mercados de bonos repuntó tras esos comentarios, con los mercados de futuros descontando una probabilidad de alrededor del 10% de un aumento de tasas de un cuarto de punto en la próxima reunión de la Reserva Federal.
Otros oradores de la Fed abogaron el miércoles por un enfoque cauteloso sobre futuras medidas.
El gobernador Christopher Waller dijo que la Reserva Federal podría observar lo que sucede antes de tomar más medidas con las tasas de interés, a medida que los mercados financieros se ajustan. El presidente de la Reserva Federal de Atlanta, Raphael Bostic, dijo que el banco central no necesita seguir elevando las tasas de interés a menos que el descenso de la inflación comience a estancarse.
Las minutas señalaron que la economía se expande a un ritmo sólido, los mercados laborales alcanzan un mejor equilibrio y que la inflación, aunque se ha enfriado, todavía está por encima del objetivo. La Reserva Federal de Dallas, que elimina los precios atípicos del índice de precios de gastos de consumo personal, calculó la tasa de inflación anual semestral en 3,1% para agosto, frente al 3,4% en julio.
Los funcionarios de la Fed estiman que necesitan lograr un crecimiento económico por debajo de la tasa tendencial del 1,8% para frenar los aumentos de precios.
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