Bloomberg — La política del Banco Central Europeo contribuirá a domar la inflación, según su Presidenta, Christine Lagarde.
“Queremos llevar la inflación al 2% y lo conseguiremos”, declaró Lagarde a La Tribune Dimanche en una entrevista, añadiendo que una espiral inflacionista “debe evitarse absolutamente”.
El BCE aumentó el mes pasado los costes de financiación por décima vez consecutiva para situar el tipo de depósito en el récord del 4%. La mayoría de los responsables políticos han indicado que mantener este nivel durante algún tiempo debería ser suficiente para que la inflación vuelva a situarse en el objetivo, aunque los funcionarios más halcones indican que podrían ser necesarias más subidas.
“Los tipos de interés oficiales del BCE han alcanzado niveles que, si se mantienen durante un tiempo suficientemente prolongado, contribuirán de forma decisiva a que la inflación se acerque a nuestro objetivo lo antes posible”, declaró, repitiendo la postura política más reciente de su institución.
La agresividad de los tipos del banco central ha lastrado la economía, que apenas ha crecido este año, aunque Lagarde subrayó que su objetivo no era crear una recesión.
Dijo que “no es pesimista” sobre las perspectivas de crecimiento a corto plazo, aunque reconoció que Alemania es un factor que lastra las perspectivas europeas.
La inflación persiste, pero se ralentiza, y al mismo tiempo el crecimiento se debilita, dijo.
“Por eso el Fondo Monetario Internacional ha revisado a la baja sus previsiones en todo el mundo, salvo en Estados Unidos”, dijo Lagarde.
Está previsto que el FMI publique nuevas proyecciones económicas el martes, antes de su reunión anual.