Bloomberg Línea — Los problemas de la industria del lujo van en aumento: los grandes almacenes estadounidenses atraviesan dificultades y China no cumple las expectativas como motor de crecimiento en el mundo pospandémico.
“Llegamos a 2023 con la predicción de que el lujo crecería probablemente un 10%”, dijo Rachid en una entrevista con Bloomberg TV. “Hemos visto señales muy fuertes de que será mucho peor”, según Rachid Mohamed Rachid, presidente de la casa de moda Valentino.
El ejecutivo afirmó que en 2022 el sector desafió los sombríos titulares y creció hasta un 20% en algunos lugares.
El panorama más sombrío está alimentando más rumores de consolidación después de que Kering SA acordara comprar una participación del 30% en Valentino en julio por 1.700 millones de euros (US$1.800 millones). Tapestry Inc, propietaria de marcas como Coach y Kate Spade, también acordó adquirir la matriz de Michael Kors, Capri Holdings Ltd., en una operación de US$8.500 millones el mes pasado, y la firma de cosméticos Estée Lauder Cos. se ha hecho con Tom Ford en una operación de US$2.800 millones.
Antes del acuerdo con Kering, que aún no se ha cerrado, Valentino planeaba una oferta pública inicial para crear un “acuerdo más institucional” y atraer mejores talentos, dijo Rachid, que también es director ejecutivo de Mayhoola de Qatar, el fondo de inversión que posee Valentino y la casa de moda francesa Balmain. La inversión de Kering, sin embargo, contribuye a ambos objetivos.
Aunque es probable que Kering aumente su participación en Valentino en los próximos cinco años, incluso con una adquisición total, también es posible que Mayhoola se convierta en accionista de Kering, según Rachid.
“La intención es integrarnos más”, afirma. “Pero, al mismo tiempo, ampliar el horizonte de la inversión en lujo”.
- Con la colaboración de Kriti Gupta.
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