Banco Central de Brasil dice que mayores alzas de tasas son improbables

Algunos miembros del consejo expresaron una mayor preocupación por la firmeza de las estimaciones de aumento futuro de los precios

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Bloomberg — En las actas recientemente publicadas de su reunión de política monetaria de los días 19 y 20 de septiembre, el banco central de Brasil moderó las expectativas de un ritmo más rápido de recortes de tasas de interés.

El banco hizo hincapié en varios factores determinantes que configurarían la duración del ciclo de relajación monetaria, centrándose especialmente en las persistentemente elevadas expectativas de inflación a largo plazo, que siguen superando el objetivo.

Los banqueros centrales articularon su punto de vista afirmando: “El Comité juzga que existe una baja probabilidad de una intensificación adicional del ritmo de ajuste, ya que ello requeriría sorpresas positivas sustanciales que elevarían aún más la confianza en la dinámica desinflacionista prospectiva.”

La clave de su estrategia es la búsqueda de una mejora “mucho más sólida” de las expectativas de inflación, que actualmente se sitúan por encima del rango objetivo del 3% fijado para los años 2024 a 2026. En concreto, algunos miembros del consejo expresaron una mayor preocupación por la firmeza de las estimaciones de aumento futuro de los precios, que se han mantenido en el 3,5% durante los últimos tres meses.

“El Copom evalúa que la reducción de las expectativas se producirá a través de una conducta firme, en línea con el objetivo de reforzar la credibilidad y la reputación tanto de las instituciones como de los marcos económicos”, escribieron.

Los responsables de formular políticas, dirigidos por Roberto Campos Neto, están relajando la política monetaria a medida que disminuye la inflación de los servicios. Han reafirmado su plan de mantener los recortes de tipos de medio punto al menos hasta diciembre, relajando gradualmente la política monetaria tras una agresiva campaña de endurecimiento que había elevado los costes de endeudamiento a máximos de seis años.

La inflación anual se está acelerando, aunque tanto el crecimiento de los precios de los servicios, que se sigue de cerca, como las medidas básicas que excluyen la energía y los alimentos se están ralentizando.

La economía sigue resistiendo a los tipos altos después de que una cosecha abundante, un mercado laboral resistente y una fuerte demanda de servicios impulsaran la actividad por encima de la mayoría de las previsiones durante el primer semestre del año.

Los inversores están cada vez más preocupados por las perspectivas fiscales de Brasil, ya que el Gobierno respalda medidas para aumentar los ingresos y cumplir sus promesas de eliminar el déficit fiscal primario del próximo año, que excluye el pago de intereses. En las actas, los banqueros centrales subrayaron la importancia de cumplir esos objetivos.

Brasil forma parte de una creciente lista de países latinoamericanos -entre ellos Perú, Chile, Uruguay y Paraguay- que han relajado su política monetaria en las últimas semanas.

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