Bloomberg — Rusia, uno de los principales proveedores de diésel a nivel global, anunció a través de un decreto que prohibirá las exportaciones en busca de estabilizar el mercado doméstico de combustible. La medida también aplica a la gasolina.
La medida podría agravar la escasez actual del mercado global de diésel. Los refinadores de petróleo del mundo están teniendo dificultades para producir suficiente combustible en medio de menores suministros desde Rusia y Arabia Saudita, los principales productores de la OPEP y sus aliados.
El gobierno ruso ha estado teniendo reuniones con productores para decidir medidas que reduzcan los crecientes precios del combustible. La semana pasada, el presidente del país, Vladimir Putin, dijo que funcionarios y empresas habían acordado cómo actuar en el futuro.
La escalada de los precios de los carburantes para automóviles ha sido uno de los factores que más han contribuido a la inflación, un posible quebradero de cabeza político mientras el Kremlin se prepara para las elecciones presidenciales de marzo. Los precios al por menor de la gasolina y el gasóleo en Rusia han subido un 9,4% desde principios de año hasta el 18 de septiembre, frente a un aumento general de los precios al consumo del 4%, según los datos más recientes del Servicio Federal de Estadística.
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