Bloomberg — Los republicanos conservadores de EE.UU. se están preparando activamente para el posible regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Las iniciativas lideradas por el America First Policy Institute, un think tank dedicado a impulsar la agenda de Trump, y la Heritage Foundation, una organización conservadora, ya están en marcha para facilitar una transición suave al próximo presidente republicano.
El America First Policy Institute, en concreto, tiene previsto desvelar su estrategia durante un acto en Washington. Su objetivo es desarrollar guías completas para el personal de la administración entrante, con recomendaciones políticas de personas que desempeñaron diversas funciones durante la primera administración Trump. Estas guías se están elaborando con valiosos puntos de vista de nueve ex miembros del gabinete, 20 asesores de alto nivel de la Casa Blanca y un grupo de 400 ex funcionarios de la administración Trump.
Los esfuerzos muestran cómo Trump, a pesar de enfrentarse a un abarrotado campo de contendientes, ya es el nominado republicano de facto. También demuestra cómo el establishment del Partido Republicano en Washington ha pasado de no estar preparado para hacer frente a Trump en 2016 a planificar proactivamente su próximo ascenso. Los grupos dicen que cualquier candidato republicano podría utilizar sus planes, pero sus esfuerzos se están desarrollando con personas y políticas centradas en Trump en mente.
“Se trata realmente de frenar el estado administrativo y asegurarse de que la próxima administración de America first pueda comenzar a funcionar”, dijo Doug Hoelscher, un ex funcionario de Trump que lidera el proyecto en AFPI. “Realmente estamos estableciendo la perspectiva práctica sobre cómo el próximo presidente de America first puede implementar sus planes más rápidamente”.
El resultado es que Trump -que dejó muchos puestos de altos cargos políticos sin cubrir durante su primer mandato porque dijo que eran “innecesarios”- podría llegar a la Casa Blanca por segunda vez como uno de los presidentes republicanos más preparados para rehacer la burocracia federal a su imagen y semejanza.
Reclutamiento de candidatos
Los grupos están creando bancos de currículos para puestos de designación política y guías para que los funcionarios entrantes promulguen rápidamente las políticas favoritas de Trump. Han empezado a desarrollar políticas, pero aún tienen que compartir sus recomendaciones sobre personas para ocupar puestos clave.
La Heritage Foundation está trabajando con altos funcionarios de la administración Trump, incluido el ex director de la Oficina de Administración y Presupuesto Russell Vought, el ex asesor de Trump John McEntee, el ex jefe adjunto de personal de la Casa Blanca Rick Dearborn y el ex director de la Oficina de Asuntos Legislativos Eric Ueland para desarrollar planes de políticas para la próxima administración republicana.
El grupo publicó un libro de 1.000 páginas con cientos de ideas, incluidos requisitos de trabajo para las prestaciones nutricionales y una importante reducción de la Agencia de Protección Medioambiental.
También ha creado una base de datos de personal en línea, a la que ha bautizado como “LinkedIn conservador”, para reclutar a los cargos políticos de la próxima administración. Antes de presentar su currículum, los aspirantes deben decir si están de acuerdo con varias afirmaciones, entre ellas: “EE.UU. debe imponer aranceles con el objetivo de recuperar puestos de trabajo en el sector manufacturero, aunque estos aranceles se traduzcan en un aumento de los precios al consumo” y “EE.UU. tiene derecho a seleccionar a los inmigrantes en función de su país de origen”.
Los republicanos llevan mucho tiempo a la zaga de los demócratas en la planificación de una transición de la mano de obra federal, dijo Paul Dans, director del Proyecto de Transición Presidencial 2025, que coordina la Fundación Heritage. Dans fue jefe de personal de la Oficina de Gestión de Personal de EE.UU. bajo Trump.
Los presidentes tienen que cubrir unos 4.000 puestos de designación política en todo el gobierno federal. Más de 1.200 de ellos requieren la confirmación del Senado. Como mínimo, Dans dijo que espera tener 1.000 designados para comenzar el primer día de una administración republicana, igualando el número que el presidente Joe Biden juró el día de su inauguración.
“Lo que realmente intentamos es sentar las bases para que la gente entienda que cuando elige al presidente, no elige necesariamente al gobierno”, dijo Dans.
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