Bloomberg — Estados Unidos tiene previsto suavizar restricciones impuestas a las pequeñas empresas cubanas. Este cambio pretende facilitar un mayor apoyo financiero estadounidense a las pequeñas empresas de la frágil economía del país insular.
Se espera que las autoridades estadounidenses den a conocer las modificaciones normativas diseñadas para reforzar el sector empresarial cubano, posiblemente esta misma semana. Los ajustes pretenden proporcionar cierto alivio a las empresas privadas del país controlado por el gobierno comunista, que se enfrenta a problemas económicos exacerbados por el prolongado embargo comercial estadounidense que se remonta a la década de 1960.
Estas medidas, defendidas por los partidarios del compromiso con Cuba, podrían anunciarse durante la visita del Presidente cubano Miguel Díaz-Canel a Nueva York para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas, que comienza el martes.
Las medidas, que probablemente permitirán a los empresarios cubanos acceder al sistema bancario de EE.UU., “harán la vida más fácil a las Mipymes”, dijo el abogado Pedro Freyre, con sede en Miami, utilizando el acrónimo español para micro, pequeñas y medianas empresas.
El gobierno de Biden considera a los empresarios como la mejor esperanza de Cuba para hacer crecer su economía y frenar la salida de emigrantes de la isla, dijo un funcionario del Departamento de Estado, hablando en segundo plano. El funcionario declinó confirmar que estuviera pendiente un anuncio, pero dijo que la política de EE.UU. busca apoyar al pueblo cubano al tiempo que restringe cualquier beneficio al régimen y a los militares.
Máxima presión
Aunque el gobierno cubano esperaba que Biden revirtiera rápidamente la política de “máxima presión” aplicada por Donald Trump, no hay indicios de que sean inminentes cambios más radicales. Los demócratas estadounidenses son cautelosos a la hora de hacer algo que pueda alienar a los votantes cubano-americanos de Florida, un estado indeciso clave, de cara a las elecciones de 2024.
Pero ayudar a los empresarios es “algo que cuenta con apoyo bipartidista, porque los republicanos, por supuesto, están de acuerdo con cualquier cosa que impulse la industria privada y la empresa privada en Cuba”, según Freyre, un demócrata que participó activamente en los debates políticos durante el intento de distensión con Cuba del presidente Barack Obama.
Cuba está sufriendo su peor crisis económica desde el colapso de la Unión Soviética hace tres décadas, con apagones, escasez y una inflación galopante. El endurecimiento de las sanciones bajo el mandato de Trump y la caída del turismo provocada por la pandemia de Covid-19 agravaron la recesión.
Migración masiva
El año pasado, la última oleada de personas que huyeron del país superó el recuento del puente marítimo del Mariel de 1980 y la crisis de los balseros de 1994 juntas.
El gobierno de Díaz-Canel quiere que Estados Unidos lo retire de su lista de Estados patrocinadores del terrorismo. Pero la represión del régimen contra los manifestantes en 2021, más las acusaciones -que La Habana niega- de que ayudó a enviar cubanos a luchar por Rusia en Ucrania, dejan a Cuba con poca influencia y pocos amigos en Washington.
Por eso, según un veterano republicano de la política hacia Cuba, los movimientos inminentes tendrán un alcance limitado.
El equipo de Biden “no ha mostrado ningún apetito por volver a comprometerse al nivel de la administración Obama”, dijo José Cárdenas, que trabajó en asuntos de América Latina en la administración de George W. Bush. “No va a haber Normalización 2.0. Realmente ven poco lado positivo, políticamente, a tal iniciativa”.
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