Yellen “se siente muy bien” sobre el aterrizaje suave de la economía estadounidense

En entrevista, la Secretaría del Tesoro de Estados Unidos le restó importancia a los intentos de China por darle peso al grupo de los BRICS

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Bloomberg — La secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, se mostró cada vez más confiada en que Estados Unidos será capaz de contener la inflación sin dañar gravemente el mercado laboral, alabando los datos que muestran una desaceleración constante de la inflación y una nueva afluencia de solicitantes de empleo.

“Me siento muy bien con esa predicción”, dijo Yellen el domingo cuando se le preguntó sobre sus anteriores esperanzas de que EE.UU. evitaría una recesión a la vez que contenía las subidas de los precios al consumo. “Creo que habría que decir que estamos en un camino que se parece exactamente a eso”.

En una entrevista en su avión de regreso de la cumbre del Grupo de los 20 en Nueva Delhi, la responsable del Tesoro también restó importancia a cualquier riesgo derivado de los esfuerzos de China por aumentar el peso de la agrupación separada BRICS de las principales naciones emergentes. “El G-20 “sigue siendo el principal foro de cooperación mundial”, afirmó.

Yellen y el Presidente Joe Biden asistieron a la reunión, a la que faltó el Presidente de China, Xi Jinping, con el telón de fondo de una serie de datos positivos sobre la mayor economía del mundo. La inflación general se ha ralentizado hacia el 3% -aunque sigue por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal- sin que se haya producido ningún descenso en las nóminas o el PIB.

“Todas las medidas de la inflación van a la baja”, dijo Yellen. También destacó que, aunque la tasa de desempleo de EE.UU. aumentó en agosto tras alcanzar a principios de año los niveles más bajos en más de medio siglo, ese salto no se debió a una gran oleada de despidos.

La tasa de paro se situó en el 3,8% el mes pasado, gracias en parte a un aumento de la tasa de actividad hasta el nivel más alto desde febrero de 2020, justo cuando Covid empezó a extenderse.

Ver cierta relajación en el mercado laboral es “importante y algo bueno”, y “es una clara ventaja” que venga a través de más gente buscando trabajo, dijo Yellen.

Los datos suponen una especie de validación para la jefa del Tesoro, que ha afirmado sistemáticamente durante el último año que ve un camino para que la inflación alcance el objetivo del 2% de la Reserva Federal sin un repunte del desempleo.

Con otras cifras que muestran un aumento sostenido del gasto de los consumidores y signos de estabilización en el mercado inmobiliario a pesar de la subida de los tipos hipotecarios, los economistas han abandonado o pospuesto sus previsiones de recesión.

Los retos de China

Por su parte, los economistas de Goldman Sachs Group Inc. ven ahora sólo un 15% de posibilidades de que EE.UU. entre en recesión, frente al 20% anterior.

Las señales positivas para EE.UU. contrastan con los decepcionantes datos de China, que sugieren que la segunda economía mundial podría no alcanzar el objetivo de Pekín de un crecimiento del 5% este año.

Yellen reiteró su opinión de que los responsables políticos chinos aún tienen margen para dar un paso adelante si es necesario para apoyar la economía. El equipo de Xi ha adoptado una serie de medidas para relajar las restricciones sobre el mercado inmobiliario, pero se ha abstenido de aplicar amplios paquetes de estímulo al consumo o recortes radicales de los tipos de interés.

“Creo que tienen bastante espacio político si deciden que es necesario utilizarlo”, dijo Yellen en la entrevista. “Han hecho lo que a mí me parecen ajustes relativamente pequeños en política monetaria”.

Los datos divergentes de las dos economías han contribuido a la depreciación de la moneda china frente al dólar, con el yuan offshore cayendo la semana pasada hacia un mínimo histórico. Esto ha llevado a Pekín a tomar una serie de medidas para frenar la caída. Yellen señaló que esas medidas son comprensibles.

El yuan cae hacia mínimos históricos mientras China cede en su lucha con los osos

“Quieren que el mundo, incluidos sus propios ciudadanos, confíen en su economía y en su sistema financiero”, dijo.

En cuanto al reciente impulso de China para ampliar el grupo BRICS con seis nuevos miembros, Yellen destacó que esta asamblea cuenta con naciones con “intereses muy divergentes”.

India -que acogió la cumbre del G-20 y también es miembro de los BRICS- mantiene una duradera disputa fronteriza con China, y la ausencia de Xi en la reunión de Nueva Delhi este fin de semana avivó las especulaciones sobre un desaire a su gigantesco vecino.

Estados Unidos mantiene “una serie de alianzas sólidas y reforzadas” con varios de los BRICS-11, incluida una reciente cooperación en materia de biocombustibles en la que participan Brasil y Sudáfrica, dijo Yellen. También señaló la importancia del trabajo del G-20 en los últimos dos años sobre los desafíos globales, incluyendo la salud, la seguridad alimentaria y los préstamos.

India y Vietnam

“El G-20 sigue siendo el principal foro de cooperación mundial”, afirmó Yellen. “Se ha puesto de manifiesto muy claramente en esta serie de reuniones”.

También destacó una relación “extremadamente fuerte” con India, que con el último viaje se convirtió en el país que Yellen ha visitado más veces como secretaria del Tesoro: cuatro.

El impulso estadounidense a los mercados emergentes se ha traducido también en el estrechamiento de lazos con Vietnam, un centro neurálgico de la electrónica de consumo que tiene sus propias tensiones fronterizas con China. Biden viajó a Vietnam tras su visita a la India, y Yellen lo hizo a principios de verano.

A su regreso a EE.UU., Yellen y Biden se enfrentan a otro enfrentamiento sobre cuestiones fiscales. El Congreso aún no ha aprobado los proyectos de ley anuales de asignaciones federales, lo que deja a Washington abocado a un posible cierre parcial del Gobierno a finales de este mes.

En la entrevista del domingo, Yellen reiteró su perspectiva relativamente optimista sobre la trayectoria fiscal de EE.UU., a pesar del creciente déficit presupuestario, impulsado en parte por el aumento de los costes de los intereses. En los 10 primeros meses del año fiscal, el pago de intereses ascendió a 726.000 millones de dólares.

Los mayores gastos por intereses crean presiones sobre el déficit y exigen cautela, dijo Yellen, destacando que Biden “cree firmemente en tener un presupuesto fiscalmente sostenible”.

“Creo que donde estamos está bien”, dijo sobre la sostenibilidad de las finanzas federales.