Bloomberg — India impuso más restricciones a los envíos de arroz para garantizar su seguridad alimentaria, una medida del principal exportador que probablemente apretará aún más el suministro global de este grano. El gobierno impuso un impuesto del 20% a la exportación de arroz vaporizado con efecto inmediato, según una notificación del Ministerio de Finanzas publicada el viernes por la noche, confirmando un informe anterior de Bloomberg News. India ha restringido ahora las ventas en el extranjero de todas las variedades de arroz no basmati, que representan aproximadamente el 80% de sus envíos totales de arroz. Su participación en el comercio global de arroz es de aproximadamente el 40%.
Los precios del arroz asiático alcanzaron su nivel más alto en casi 15 años a principios de este mes y podrían seguir aumentando, lo que aumentaría los costos para importadores como Filipinas y algunas naciones africanas. Las medidas proteccionistas recientes de India están en línea con sus esfuerzos agresivos para enfriar los precios locales de los alimentos antes de las elecciones generales a principios del próximo año, cuando el primer ministro Narendra Modi buscará un tercer mandato.
“Con esta medida, los precios internos caerán y eso ayudará al gobierno a controlar la inflación alimentaria”, dijo B.V. Krishna Rao, presidente de la Asociación de Exportadores de Arroz. “Pero los precios globales aumentarán y los compradores deberán absorber el aumento. También habrá renegociaciones entre compradores y vendedores en algunos contratos”.
El arroz es un alimento básico para aproximadamente la mitad de la población mundial. Las restricciones de India llegan en un momento en que los costos de los alimentos siguen siendo elevados debido a la guerra de Rusia en Ucrania y a medida que las condiciones climáticas volátiles en todo el mundo amenazan el suministro de granos y oleaginosas. Existe la preocupación de que la decisión de India de garantizar la seguridad alimentaria nacional afecte a varias naciones más pobres que aún luchan por recuperarse de las recesiones económicas causadas por la pandemia de Covid-19.
El arroz parboiled representa aproximadamente un tercio de los envíos totales de arroz de India. El país ya ha prohibido las exportaciones de arroz quebrado y arroz blanco no basmati, ha limitado los envíos de trigo y azúcar y ha restringido el acopio de algunos cultivos. India también está considerando abolir un arancel del 40% a la importación de trigo y vender tomates, cebollas y granos de las reservas estatales para mejorar los suministros locales.
El parboiling es un proceso que implica hervir parcialmente el arroz antes de molerlo para aumentar sus valores nutricionales y cambiar la textura del arroz cocido. Algunos restaurantes utilizan arroz parboiled porque ya está limpio y es fácil de cocinar.
El gobierno dijo que los exportadores que tengan cartas de crédito válidas antes de la nueva regla aún podrán enviar el grano. El impuesto a la exportación de arroz parboiled seguirá en vigor hasta el 15 de octubre, según indicó.