Bogotá — En medio de la depreciación de las monedas en algunos de los principales países de la región, la volatilidad de los mercados y la incertidumbre política, los latinoamericanos más adinerados se fijan en el negocio de las franquicias estadounidense para invertir y encontrar una fórmula para migrar a Norteamérica.
El vicepresidente de la Cámara Colombiana de Franquicias y director de Fanyf, Luis Felipe Jaramillo, explica a Bloomberg Línea que el componente migratorio explica buena parte del interés de los latinoamericanos por las inversiones en franquicias en EE.UU.
Según el directivo, los inversores latinoamericanos están viendo en este esquema una posibilidad de acceder a una visa E2.
Asimismo, considera que el otorgamiento de permisos de reunificación familiar para ciudadanos de la región abre la puerta a este tipo de inversiones en EE.UU.
“Siempre hay interés por las franquicias estadounidenses, no en vano en Colombia hay un poco más de 60 marcas de EE.UU. operando en el país”, dijo el directivo.
El director de la firma de asesores FranNet, José Torres, explicó a este medio que en los últimos años se ha reflejado un incremento en el interés de extranjeros para invertir en franquicias de EE.UU., especialmente en mercados como Colombia.
Menciona que los inversores apuntan principalmente por una alternativa para diversificar sus activos e ingresos en moneda dura en un momento turbulento para la economía mundial.
Mencionó que los latinos están apostando por franquicias consideradas de bajo riesgo en industrias de servicios esenciales.
Detalló que se están moviendo principalmente las inversiones desde Latinoamérica en las franquicias en el sector automotor, en el área de limpieza y remodelación, así como de mejoras al hogar.
Los principales requisitos para adquirir una franquicia en EE.UU. incluyen la visa E2, que les permite a las personas invertir en ese modelo, además de residir y trabajar legalmente en ese país.
“También el cónyuge de ese inversor latino puede trabajar en EE.UU. y sus hijos menores de 21 años también pueden estudiar en ese país”, mencionó.
En cuanto a los costos, se tiene que en el mercado estadounidense hay franquicias desde los US$50.000 en adelante.
No obstante, José Torres manifestó que para que un inversionista pueda acceder a una visa E2 debería poder realizar inversiones desde los US$100.000 en adelante.
Otras condiciones para este tipo de visa incluyen garantizar la generación de empleo y el aporte vía impuestos en ese país, precisó el especialista en franquicias y representante de la firma CarWash Points, Gabriel Remolina.
El asesor en ese modelo de negocio Jaime Sánchez señala que en Estados Unidos hay más de 5.000 marcas de franquicias y más de 800.000 propietarios de estas.
Algunas claves para adquirir franquicias en ese país incluyen entender en profundidad el modelo y asociarse preferiblemente a una marca que ya tenga una reputación creada.
Explica que, si bien el ticket más alto se presenta en el segmento de los servicios, que a su vez es uno de los que menos barreras de entrada presenta para comprar, los ingresos están directamente relacionados con el modelo de ejecución.
En el segmento de servicios también se debe considerar que este tiene una serie de demandas específicas, al requerir de técnicos especiales y, por lo tanto, la exigencia de licencias es superior.
Precisó que luego de la adquisición y la firma de los acuerdos correspondientes, los inversores deben enfocarse en el prelanzamiento.
Esto incluye la consecución de las oficinas, empleados, las licencias y permisos ocupacionales.
Al respecto, explica que normalmente una visa E2 va a requerir una dirección de oficina, que le va a pedir el abogado migratorio.
Una vez termine este proceso, ya se puede iniciar con la operación.
Los hispanos representan el 19% de la población de Estados Unidos y son un motor importante de la economía.
Se estima que esta población genera una riqueza de US$2,8 billones en EE.UU., en donde además son propietarios de 4,7 millones de negocios.