Bloomberg — La Cámara Baja del Congreso de Brasil aprobó la legislación que busca reforzar las finanzas públicas de la nación y aliviar las preocupaciones del mercado en torno a los planes de gasto propuestos por el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Los legisladores votaron a favor del plan fiscal por 379 votos a favor y 64 en contra, y el proyecto aprobado se enviará ahora al Presidente Lula para su aprobación formal.
Con la aprobación de la ley, el gobierno de Lula podrá ajustar su proyecto de presupuesto para 2024 a las nuevas normas fiscales. Este hecho también contribuyó a la apreciación de la moneda local: el real ganó un 0,8% frente al dólar, impulsado por un repunte más amplio provocado por la caída de los rendimientos del Tesoro.
En particular, la Cámara Baja introdujo ligeros ajustes en la versión que había recibido la aprobación del Senado en junio. En concreto, eliminaron una disposición que habría concedido al Gobierno 40.000 millones de reales (US$8.100 millones) adicionales en autorización de gasto. Sin embargo, en un esfuerzo de colaboración, los líderes del Congreso acordaron permitir al gobierno restablecer este gasto a través del proceso presupuestario anual ordinario.
Las normas permiten al Gobierno aumentar el gasto entre un 0,6% y un 2,5% por encima de la tasa de inflación, con un límite del 70% del crecimiento de los ingresos.
El marco fiscal, una de las principales prioridades del Ministro de Hacienda, Fernando Haddad, y del equipo económico de Lula, sustituirá al denominado techo de gasto que se había venido aplicando para limitar los gastos.
Los inversores, escépticos ante el compromiso del gobierno de izquierdas con la austeridad fiscal, acogieron con gran satisfacción el diseño del plan por parte de Haddad y su aprobación inicial a principios de este año.
La Cámara Baja mantuvo las enmiendas del Senado que eximían del marco los fondos para educación y el Distrito Federal.
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