Bogotá — El número de criptomonedas creció de manera sostenida desde el 2013, pero una década después está experimentando su primera caída en medio del barrido que se ha producido por el llamado criptoinvierno, que desencadenó en la quiebra de algunos jugadores estratégicos y la reorganización de ese mercado, coincidiendo con un importante descenso de la valorización de las mismas.
En el 2022 se alcanzó el pico en cuanto a la cantidad de criptomonedas disponibles en el mercado, pero luego de la estrepitosa caída de la moneda estable Terra USD y la quiebra de la plataforma de intercambio de criptomonedas FTX, entre otros, el mercado también ha venido experimentando cambios.
Quizá uno de los más visibles se relaciona con la cantidad de criptomonedas disponibles en el mundo, que en junio pasado totalizaron unas 10.049, de acuerdo a cifras recopiladas por Statista.
No obstante, basado en diferentes fuentes, explica que 12 meses antes se alcanzó un máximo de unas 10.830.
Aun así, mercados emergentes como los de Latinoamérica siguen moviendo el negocio y a principios de mes la firma argentina Ripio anunció que ha lanzado la que es considerada como la primera stablecoin latinoamericana, denominada como “Criptodólar”.
Según informó Bloomberg, esta moneda estable cotizaría bajo el UXD y mantendrá una paridad de 1 a 1 con el dólar.
Todo este colapso que ocurrió después de 2021, después del ATH (precio histórico de bitcoin), deja al descubierto que la falta de dinero hace correr en quiebra a las empresas que malgastan y mal administran ese capital.
Asesor de inversiones en criptoactivos en CR Academia, Camilo Rodríguez
El anuncio fue relevante para el negocio cripto latinoamericano, puesto que con este desarrollo se inicia formalmente la carrera en Latinoamérica por la adopción no solo de monedas estables emitidas localmente, sino también de infraestructura blockchain propia.
“Estamos en un bear market y es muy normal que ese número de proyectos empiecen a cerrar por diferentes razones”, explicó en entrevista con Bloomberg Línea el codirector del grupo de investigación InTIColombia de la Universidad Nacional de Colombia y cofundador de Tropykus, Mauricio Tovar Gutiérrez.
Indicó que esto puede ocurrir porque estos proyectos o no tenían los fundamentales, eran una estafa o simplemente se les acabó la gasolina.
Para el especialista en criptomonedas, en un entorno bajista tan prolongado como el actual, los inversores comienzan a concentrarse más en aquellas cripto que les ofrecen más valor como bitcoin, ethereum, entre otros.
Con esto, el resto de la cola de criptomonedas no son tan tenidas en cuenta y seguramente empiecen a desaparecer, dijo.
“También habría que ver si es específicamente que hay menos de esas criptomonedas o si las están deslistando con CoinMarketCap (el sitio criptográfico de seguimiento de precios). Esa es otra posibilidad, al tener muy bajo volumen, los empiezan a deslistar”, apuntó.
Mayor vigilancia en el mercado de las criptomonedas
El director del TicTank de la Universidad del Rosario, Erick Rincón Cárdenas, coincide en que la creación y número de criptomonedas descienden porque “ya el mercado está depurando un poco la existencia de nuevos valores”.
“Crear criptomonedas se ha convertido en un ejercicio experimental. Primero, pues los exchanges ya están comenzando a tomar medidas de debida diligencia para revisar qué criptomonedas realmente tienen aspectos técnicos de valor y que el mercado las acepte”, apuntó en conversación con Bloomberg Línea.
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En segunda instancia, cada vez cobra más relevancia el hecho de que la propuesta u oferta de valor no impliquen riesgos propios, por ejemplo, relacionados con el fraude, la estructura técnica y de ciberseguridad de cada una de las criptomonedas.
Y que también se prevenga la relación de los creadores con posibles lavados de activos y financiamiento del terrorismo.
“Por ende, creo que plataformas como Binance, que no tenían filtros de aceptación en las criptomonedas, han tratado de deslistar gran parte de los criptoactivos que estaban listando. Y de hecho, pues estaban generando unos controles mayores en la constitución. Lo mismo que otras plataformas que también les ha tocado por presiones propias de las regulaciones que se están esperando para esto”, reflexionó Rincón Cárdenas.
“Entonces creo que ese descenso responde a ese fenómeno que está pasando en cuanto a carga regulatoria, validación de la oferta de valor de cada una de las criptomonedas y pues este checklist del control de riesgos que hay en cada una de las plataformas”, ahondó.
Los errores en el camino de las criptomonedas
En opinión del asesor de inversiones en criptoactivos en CR Academia, Camilo Rodríguez, esta caída en el número de criptomonedas se da a raíz de marzo de 2021, cuando bitcoin supera los US$69.000 como máximo histórico.
“A partir de que se da ese máximo histórico, básicamente lo que ocurre es que empezamos a tener varios colapsos financieros de diferentes tipos de empresas”, dijo en entrevista con Bloomberg Línea.
Esta fecha es clave, puesto que “salieron a la luz una gran cantidad de proyectos que venían completamente sustentados por una maquinaria de influenciadores, de medios de comunicación y claramente de un capital ocioso que se encontraba en el mercado”.
Y a media que el precio fue cayendo luego de ese pico histórico, se empieza a evidenciar durante el bear market que empresas del sector comienzan a caer por cuenta de una falta de fondos y base monetaria, así como una mala distribución de los tokenomics (economía de tokens) de algunas cripto que hacía que se atribuyera una cantidad de dinero a los inversos tempranos que después salían a vender esas monedas y dañaban la salud del activo, afectando a quienes estaban entrando.
“Eso lo que genera es una espiral de la muerte, porque a medida que el bear market se va prolongando y más gente está vendiendo de forma agresiva en los mercados, un pánico de venta empieza a correr y mucha gente retira capitales de plataformas, fondos, entre otros”, relató Rodríguez.
Con este panorama, plantea que “es solo durante los bear markets y las fuertes caídas de los mercados que sobreviven realmente los proyectos que son legítimos al largo plazo. Asimismo, los usuarios de criptomonedas son más ávidos al no dejar su capital su dinero en cualquier aplicación o cualquier tipo de criptomoneda”.
“Las continuas estafas desde los máximos del 2021, las falsas esperanzas por parte de los influenciadores, la maquinaria de marketing de los NFT y de todas las piezas que realmente no tenían un valor por detrás, dado que muchos de esos proyectos desaparecieron con los fondos de los tenedores” han terminado por golpear a las criptomonedas y hacer este barrido en los mercados, remató Camilo Rodríguez.
