Buenos Aires — El Gobierno argentino dijo que rechazó el pedido del Fondo Monetario Internacional de devaluar un 60% y recortar el déficit a 1,5% del PBI. Apenas 24 horas después de convalidar un salto del tipo de cambio de casi el 22% -lo que implica una devaluación del 18% para el peso argentino- una fuente del equipo económico del Gobierno dejó trascender que el organismo había pedido que el salto devaluatorio fuera tres veces mayor.
Desde el oficialismo, aseguran que el FMI pedía 60% de devaluación y que el déficit fiscal al cierre del año no superara el 1,5% del producto, pero que ambas exigencias fueron rechazadas por el Gobierno. Así y todo, la fuente señaló que se acordó que habrá dos desembolsos, uno por US$8.000 millones hacia el 23 de agosto (unos US$500 millones más que lo que se había informado inicialmente) y el restante por US$2.250 millones en la primera semana de noviembre. De esta manera, los desembolsos acordados para lo que resta del año ascenderían a US$10.250 millones.
Por otra parte, dentro del equipo económico insisten en que, tras el salto devaluatorio convalidado ayer, se fijará el tipo de cambio hasta el 30 de octubre. Eso, creen puertas adentro del Palacio de Hacienda, permitiría acelerar exportaciones para hacer frente a la pérdida por la sequía. Pese a ello, el mercado de dólar futuro ayer reflejó que los inversores esperan más saltos devaluatorios: para octubre, anticipan un dólar oficial de $430, un 22% más alto que los $350 que pretende sostener el Gobierno.
El plan del Gobierno para contener la inflación
Por otra parte, en el equipo económico del Gobierno confían en contener los precios tras el salto devaluatorio. Para hacerlo, apuntan a nuevos acuerdos de precios con las empresas, a las que el Estado les ofrecerá desde una disminución de impuestos hasta letras de financiamiento del BCRA para insumos importados. La discusión empieza el miércoles, y la tarea recayó sobre el titular de la Aduana, Guillermo Michel, que desplazará a Matías Tombolini al frente de negociar acuerdos para controlar precios.
Una vez cerrados los acuerdos con empresas, el Gobierno avanzará desde la semana que viene con medidas de alivio para PyMEs, trabajadores formales, beneficiarios de programas sociales y sectores de clase media para que recuperen poder de compra y mitigar así los efectos de la devaluación.