Bloomberg — La calificación crediticia de Israel fue reafirmada este lunes con una perspectiva estable por parte de Fitch, un voto de confianza sorpresivo para el gobierno en medio de su reforma judicial, la cual ha catalizado meses de protestas a nivel nacional y alterado a los inversores.
En concreto, Fitch mantuvo la calificación soberana en A+, la quinta más alta de grado de inversión y a la par de países como Arabia Saudita y Malta. En una declaración dijo que el divisivo plan del gobierno “ha sido matizado pero se mantiene altamente controversial”.
“Los cambios pueden tener un impacto negativo en las métricas de crédito de Israel si el debilitamiento de los controles institucionales conduce a peores resultados políticos o a un sentimiento negativo sostenido de los inversores o debilita los indicadores de gobernanza”, dijo. “Fitch considera improbable que las medidas actuales desencadenen un éxodo material de talento y capital en el sector de alta tecnología”.
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