Bloomberg — Está creciendo en Wall Street el coro de aquellos que consideran que habrá un aterrizaje suave. Sin embargo, no todos están tan convencidos y siguen habiendo detractores.
Aunque las probabilidades de que EE.UU. eluda una recesión parecen ser cada vez más altas, algunos economistas se aferran a sus previsiones de recesión, al menos por el momento. Apuntan a los diversos obstáculos a los que se enfrenta su economía, desde las estrictas condiciones crediticias y el menguante ahorro que viene de la época de la pandemia hasta el alza de las tasas de morosidad y la reactivación de los pagos de los préstamos estudiantiles.
Sin embargo, no solo es cuestión de crecimiento económico. También tiene que ver con la inflación. Aunque los índices han mejorado notablemente desde el 2022, algunos economistas dudan de que regrese al objetivo del 2% establecido como objetivo por la Fed sin que crezca el desempleo, lo que disminuiría las probabilidades de un aterrizaje suave.
“Desde luego, nos mostramos receptivos a la eventualidad de que la expansión siga hasta 2024″, comentó Andrew Hollenhorst, economista jefe para Estados Unidos de Citigroup Inc, (C) que prevé que la economía entrará en recesión en el primer semestre del año que viene. “No obstante, en ese supuesto, no pensamos que vayamos a tener una inflación del 2%”.
“¿Por qué no hemos eliminado la recesión de nuestro caso base?”, pregunta Hollenhorst. “Realmente se trata más de la inflación que del crecimiento”.
Hace apenas unos meses, ese escepticismo era generalizado y solo recientemente los pronosticadores han comenzado a cambiar de opinión. Bank of America Corp (BAC) y JPMorgan Chase & Co. (JPM) revocaron sus proyecciones de recesión la semana pasada, luego de un cambio de tono similar por parte de los propios economistas de la Fed.
La sorprendente resiliencia de los datos económicos recientes ha alimentado el optimismo. La tasa de desempleo, del 3,5%, se mantiene cerca de los niveles más bajos en décadas. El crecimiento económico, que se proyectó que se desaceleraría en el segundo trimestre, se recuperó.
Mientras tanto, la inflación se ha enfriado considerablemente. En junio y julio, una métrica clave que excluye los precios de los alimentos y la energía registró su menor incremento consecutivo en más de dos años, según datos publicados el jueves.
Para un grupo de pronosticadores, esa fortaleza es la razón por la que están abandonando sus pronósticos de recesión. Para otros, esa es parte de la razón por la que la están redoblando, porque creen que hay riesgo de una política aún más restrictiva del banco central.
Marc Giannoni, economista jefe para EE.UU. de Barclays Plc, está entre los segundos. En este punto, su equipo ha tenido que postergar las proyecciones del inicio de una recesión en EE.UU. más de una vez. Pero se está apegando a su pronóstico, pese a que se está volviendo “más y más difícil” hacerlo a medida que la inflación retrocede.
“No estoy convencido de que el problema de la inflación esté resuelto”, dijo Giannoni. “Frente a un mercado laboral muy fuerte, un crecimiento de ingresos aún bastante sólido, un crecimiento del consumo bastante fuerte, creo que es posible que deban ajustar la tasa un poco más”.
El economista jefe de Wells Fargo & Co. (WFC), Jay Bryson, no espera más alzas de tasas de la Fed. Pero él prevé un “ajuste pasivo” de la política monetaria en el futuro, ya que una combinación de inflación decreciente y tasas de interés estables empuja efectivamente al alza las tasas de interés ajustadas por inflación.
“Al final del día, eso es lo que importa para la economía real”, dijo Bryson. “Debido a que la política monetaria se volverá cada vez más restrictiva en los próximos meses, al menos en términos reales, así es como podría generarse este modesto tipo de recesión”.
Aun así, podría haber margen para que crezca el grupo de los que esperan un aterrizaje suave en las próximas semanas y meses, según lo que muestren los datos. Para Giannoni, los informes de inflación como el del jueves serán particularmente importantes.
“Si viéramos que los datos de inflación muestran de manera convincente aumentos mensuales inferiores al 0,2% de forma sostenida, y tuviéramos confianza en que eso se mantendría así durante mucho tiempo, creo que empezaría a pensar que la Fed se sentiría, con el tiempo, cómoda con eso”, aseveró.
“Y creo que, en ese momento, es menos probable que tengamos alguna contracción”.
Con la asistencia de Sarina Yoo “Kyungjin”, Rachael Dottle y Jennah Haque.
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