Bloomberg — Alphabet Inc. (GOOGL) puso fin ilegalmente a los contratos de la mayoría de los trabajadores de Google Help cuando intentaban sindicarse, según denunciaron sus organizadores en una queja ante la junta laboral estadounidense.
El Sindicato de Trabajadores de Alphabet acusó al gigante de Internet de violar la legislación laboral federal, que prohíbe las represalias contra los empleados por organizarse. Más del 70% de la unidad de negociación propuesta -que incluye a 118 redactores, diseñadores gráficos y coordinadores de lanzamientos que crean contenidos internos y externos de Google- recibió en julio la noticia de que perdería su empleo, según la denuncia presentada el jueves ante la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo (NLRB, por sus siglas en inglés).
Los trabajadores, cuyas tareas han incluido la mejora de la calidad de las respuestas en el motor de búsqueda y el chatbot de inteligencia artificial de Google, están contratados a través del proveedor Accenture Plc. Pero el sindicato sostiene que Alphabet es también legalmente su jefe. Ha pedido a la NLRB que designe al gigante de Internet “empleador conjunto” del personal de Accenture, es decir, una empresa que ejerce suficiente control sobre un grupo de trabajadores como para ser responsable de su trato y, si deciden sindicarse, estar obligada a negociar con ellos.
La decisión de suprimir puestos de trabajo “parece una represalia”, afirmó Anjail Muhammad, a quien se comunicó la supresión de su puesto de redactora en Accenture. “Es obvio que este momento es increíblemente sospechoso, y por eso vamos a presentar una denuncia por prácticas laborales desleales: para que Google y Accenture rindan cuentas de su comportamiento”.
Accenture no hizo comentarios inmediatamente. Cuando Accenture anunció en julio que iba a suprimir los puestos de los trabajadores, un portavoz de la empresa afirmó en un comunicado que Accenture apoya el derecho de su personal a formar sindicatos o afiliarse a ellos. Y añadieron: “Como se comunicó recientemente a nuestro personal, estas decisiones sobre la plantilla se tomaron antes de que se nos notificara cualquier posible actividad sindical.”
Un portavoz de Google dijo en julio que la empresa respeta los derechos de los trabajadores, pero que la organización era “un asunto entre ellos y su empleador, Accenture”, y que “Google no controla sus términos de empleo o condiciones de trabajo.” El jueves, la empresa dijo que sigue manteniendo esa declaración, y rechazó la idea de que los cambios para el contrato de Accenture Google Help tuvieran otro propósito que no fuera el ahorro y la eficiencia. Google dijo que elige cuidadosamente a sus socios y agencias de contratación y revisa su cumplimiento del Código de Conducta para Proveedores de la empresa.
Los trabajadores, que trabajan en Austin (Texas), la bahía de San Francisco y otros lugares de EE.UU., fueron informados de los recortes durante un “ayuntamiento” retransmitido en directo en el que no se permitían preguntas ni comentarios, según varios empleados que asistieron a la sesión y que declinaron ser identificados por tratarse de información no pública. Más tarde, recibieron un seguimiento sobre “el equipo de creación de contenidos que apoya a Google”, según un correo electrónico revisado por Bloomberg.
“Tal y como se debatió en la asamblea, el equipo de cuentas ha ajustado su apoyo a este proyecto para satisfacer las necesidades de nuestro cliente”, declaró. El equipo se reducirá de forma continua.
Tahlia Kirk, escritora y formadora de equipos, dijo que con los despidos, los empleados que trabajan en el contrato de Accenture para Google se reducirán a 40 personas con sede en EE.UU., de unas 130 que había. Dijo que han recibido instrucciones para formar a sus sustitutos que trabajan en Filipinas e India. Pero incluso con la plantilla reducida, Kirk dijo: “Confío en que tenemos un apoyo tan fuerte que ganaremos las elecciones sindicales, pase lo que pase”.
La disputa es la última controversia sobre lo que Alphabet debe a su vasto ejército de personal contratado, que en 2018 se convirtió en la mayoría de su fuerza de trabajo global. Otro grupo de personal contratado de Alphabet, empleado por Cognizant Technology Solutions Corp. para trabajar en YouTube Music en Texas, votó 41 a 0 a favor de sindicalizarse en abril. El 19 de julio, los miembros de la NLRB en Washington DC confirmaron la decisión de un director regional de que Alphabet era un empleador conjunto de esos trabajadores, lo que significa que la empresa está obligada a negociar colectivamente con ellos, por primera vez en su historia. Pero Alphabet ha señalado que seguirá negándose a negociar con los trabajadores, que sostiene que no son sus empleados, lo que significa que es probable que la cuestión acabe en un tribunal federal de apelación. “Seguiremos manteniendo nuestra postura de que no somos un empleador conjunto”, declaró el mes pasado la portavoz Courtenay Mencini.
En las entrevistas, los trabajadores rebatieron la idea de que Google tuviera poco control sobre sus puestos de trabajo.
Laura Greene, jefa de un equipo multimedia, afirmó que pasaba su tiempo en el trabajo coordinando la estrategia de contenidos con empleados de Google a tiempo completo, y que había creado libros blancos e infografías internas para personas que dependen directamente del director ejecutivo de Alphabet.
“La mayor parte de mi semana laboral, estoy hablando con Googlers, trabajando con Googlers”, dijo Greene. “Trabajo con ellos mucho más estrechamente que con los directivos de Accenture. Tengo un correo electrónico de Google, utilizo sus sistemas y equipos patentados. Y si tengo un problema con mi equipo, llamo al servicio técnico de Google”. Google afirma que no es anormal que algunos empleados contratados trabajen con Googlers o se comuniquen a través de los sistemas de Google para realizar sus tareas.
Las denuncias presentadas ante la junta son investigadas por funcionarios regionales, cuya tarea en el caso de Google Help incluiría determinar si Alphabet es de hecho un empleador conjunto. Si un director regional encuentra fundamento en las reclamaciones del sindicato y no puede llegar a un acuerdo, tramitaría el caso ante un juez de la agencia, cuyo fallo podría apelarse ante los miembros de la NLRB en DC y de ahí al tribunal federal de apelaciones.
Kirk, el formador del equipo, dijo que la decisión de Google y Accenture de suprimir la mayoría de los puestos de trabajo del equipo causaría un “daño irrevocable” a la calidad del trabajo de contenidos, dada la pérdida de conocimientos institucionales y la sustitución de empleados estadounidenses por trabajadores extranjeros a los que habrá que apresurar la formación.
“Creo que mucha gente va a decir sobre los despidos: ‘Bueno, ¿qué esperabas de una gran empresa tecnológica?”. añadió Kirk. “Pero la gente olvida constantemente que la sindicación es un derecho protegido a nivel federal. Si estas empresas intentan despedirnos para evitar que votemos en nuestras elecciones sindicales -y eso es lo que parece estar ocurriendo-, están infringiendo la ley.”
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