Bloomberg — En Wall Street crece la preocupación de que los dos motores de la subida de las acciones tecnológicas de este año corran el riesgo de estallar.
Esto se hizo evidente el jueves, cuando el índice Nasdaq 100, de gran peso tecnológico, registró la mayor caída en cinco meses, debido a que los decepcionantes informes de resultados de Netflix Inc. (NFLX) y Tesla Inc. (TSLA) empañaron las perspectivas del sector. Al mismo tiempo, los sólidos datos de empleo acentuaron la preocupación de que la Reserva Federal no esté a punto de poner fin al endurecimiento más agresivo de su política monetaria en décadas.
Y pronto llegarán pruebas de mayor envergadura.
La semana que viene, alrededor de 170 empresas del índice S&P 500, que representan el 40% de su capitalización bursátil, tienen que publicar resultados, entre ellas las tecnológicas Microsoft Corp (MSFT), Meta Platforms Inc. (META) y la matriz de Google, Alphabet Inc. (GOOGL). Y el miércoles, después de que la Fed anuncie su última decisión sobre los tipos de interés, su presidente, Jerome Powell, dará pistas sobre si los inversores acertaron al apostar que su esperada subida de tipos de un cuarto de punto será la última.
“La principal preocupación de los inversores en la segunda mitad del año gira en torno a la Fed”, afirma Eric Diton, presidente y director gerente de Wealth Alliance. “Si hay más subidas de las que espera Wall Street, será malo para los valores tecnológicos y de crecimiento. Las valoraciones tienen que bajar”.
Los valores de crecimiento son muy sensibles a los tipos de interés, que se utilizan para calcular el valor actual de los beneficios en los próximos años. Los valores tecnológicos han repuntado este año, ya que sus beneficios han demostrado ser resistentes y la Reserva Federal ha empezado a ralentizar el ritmo de subidas de tipos, manteniéndolos incluso estables en la última reunión.
Tras el avance de este año, impulsado en parte por el entusiasmo ante los avances en inteligencia artificial, las valoraciones se han disparado. El Nasdaq 100 se ha disparado un 42% este año y cotiza a 29 veces los beneficios futuros. Y las ganancias siguen aumentando: incluso después de registrar el jueves su peor día en meses, el índice está a punto de terminar la semana con un ligero descenso.
Las grandes tecnológicas también son cruciales para el índice S&P 500, ya que su elevado valor de mercado les confiere la mayor ponderación en el índice de referencia. Las cinco mayores empresas del índice -Apple, Microsoft, Amazon.com Inc., Nvidia Corp. y Alphabet- cotizan a un múltiplo combinado de 30 veces los beneficios futuros, el más alto desde marzo de 2022, según datos recopilados por Bloomberg Intelligence. Eso es casi el doble del múltiplo para el resto del índice.
Por supuesto, parte de esto también refleja las expectativas de que las ganancias de las grandes tecnológicas seguirán mejorando después de los agresivos esfuerzos de reducción de costes de las empresas. De hecho, se prevé que las cinco principales empresas del S&P 500 registren una expansión de los beneficios del 16% en el segundo trimestre, según BI. Esto contrasta con una contracción de los beneficios del 9% en el indicador más amplio de renta variable.
Otras señales son un buen augurio para los beneficios en la segunda mitad del año, sobre todo si la moderación de la inflación de los precios de producción sigue reforzando los márgenes, dijo Gina Martin Adams, estratega jefe de renta variable de BI.
“Nadie habla de la posibilidad de que las presiones sobre los beneficios sigan disminuyendo en las cinco principales empresas del S&P 500″, afirma. “En realidad, esto podría resolverse por sí solo, y el resto del índice se pondría al día con la mejora de los beneficios. En última instancia, eso ayudaría a sostener los precios de la renta variable en general”.
Microsoft, que tiene previsto presentar resultados el 25 de julio, suscitó esperanzas de que los avances de la IA empiecen a dar sus frutos tras anunciar que sus precios de las aplicaciones corporativas eran más altos de lo que muchos inversores esperaban.
Sin embargo, la fuerte subida registrada en lo que va de año ha hecho temer a algunos inversores que las expectativas del mercado bursátil hayan ido demasiado lejos, lo que ha provocado algunas comparaciones con la fase previa a la caída de las puntocom.
“El temor a que la tecnología se desinfle me preocupa en los próximos meses”, afirma Cheryl Smith, gestora de carteras y economista de Trillium Asset Management. “Si echamos la vista atrás al cambio de milenio, la certeza de Internet transformó nuestras vidas, pero en 1999 los inversores podrían haber perdido mucho dinero dejándose llevar por el bombo publicitario apostando por ellas, así que hay que tener cuidado”.
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