Bloomberg Línea — Después de los repuntes económicos de 2021 y 2022, y una mayor demanda y gasto de los hogares, en América Latina se volvió a hablar de desaceleración económica en 2023, acentuada por la alta inflación y las tasas de interés, que han golpeado el consumo.
Es así como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) dijo recientemente que la región está volviendo a la “senda de bajo crecimiento que tenía antes del Covid-19″.
Este tipo de proyecciones también se reflejan en el mercado laboral, que aunque se ha recuperado en el último año, se mantiene en tasas altas en algunos países como Colombia, en donde en mayo la tasa de desempleo nacional fue 10,5%, según el Dane; o en Chile, en donde el INE informó que la tasa de desempleo llegó a 8,5% durante el trimestre móvil marzo-mayo de este año, un aumento de 0,7% en 12 meses.
Frente a este panorama, los expertos han señalado que el empleo se verá afectado en lo que resta del año. “A medida que el crédito se contrae y los efectos del aumento de las tasas de interés se sienten en la ‘economía real’, las empresas se verán afectadas y, en última instancia, el desempleo aumentará significativamente”, dijo Derek Gallimore, director ejecutivo de Outsource Accelerator, citado por la Asociación Americana de Personas Jubiladas (AARP, por sus siglas en inglés).
Justamente, esta organización sin fines de lucro y que aboga por la situación financiera y personal de las personas mayores de 50, recopiló cuales son los sectores laborales y los empleos que más sufren en tiempos de desaceleración económica, o en su defecto, aquellos que tienen menos seguridad para trabajar, con información de Outsource Accelerator. Este es el ránking:
- Arte, entretenimiento y recreación
- Construcción
- Servicios profesionales y empresariales
- Información o comunicaciones
- Otros servicios (técnicos y del día a día)
Entre tanto, la organización señaló que los empleos generados por los gobiernos son los más seguros en medio de las crisis económicas.
La flexibilidad, una herramienta de permanencia
La encuesta de Workhuman, desarrollada por Adecco recientemente y enfocada en el comportamiento y el sentimiento de la fuerza laboral, encontró que el 36% de los empleados a nivel global planea dejar sus trabajos este año; al tiempo que predice que las tasas de rotación de personal del 20% se mantendrán en el futuro inmediato.
Ante esta realidad, la flexibilidad se ha convertido en un factor crucial para la retención de trabajadores, con el fin de enfrentar los fenómenos de la ‘Gran renuncia’ y la ‘Renuncia silenciosa’.
“La clave para retener a los empleados radica en la flexibilidad laboral, de hecho, ocupa el segundo lugar como fuerza motivacional, después del salario, e incluso por encima de una cultura laboral positiva, por lo que se convierte en uno de los factores más importantes para mantener a las personas satisfechas, conectadas con sus empleadores y comprometidas a hacer mejor su trabajo”, dijo Adecco, la compañía de recursos humanos.
Entre las acciones a implementar y que no deberían ser una opción sino un “enfoque a largo plazo”, la compañía destacó: trabajo compartido, turnos divididos, trabajo remoto permanente, semanas laborales de cuatro días, programas multifuncionales de movilidad de talentos, intercambios basados en proyectos, grupos de trabajadores independientes, y arreglos a tiempo parcial.
