El martes 11 de julio Uruguay volvió a salir al mercado internacional de deuda y logró colocar en pesos uruguayos un equivalente a US$1.267 millones, con vencimiento a diez años. Unos US$1.000 millones son financiamiento neto y otros US$267 millones se utilizarán para recomprar bonos que vencen en los próximos años.
La colocación fue toda en moneda local y a tasa fija.
Los detalle de la operación
- La emisión total alcanzó un equivalente en dólares de US$1.267 millones, a un rendimiento anual de 9,75%.
- Del total, 1.000 millones de dólares equivalente fue por efectivo y el resto será destinado a la recompra de bonos globales en dólares con vencimiento 2024, 2025 y 2027, en pesos nominales con vencimiento 2028 y bonos globales en UI con vencimiento 2027.
- El libro de órdenes consolidado estuvo compuesto por 73 inversionistas de Estados Unidos, Europa, Asia y Uruguay. La demanda total del nuevo bono alcanzó un máximo de 2.210 millones de dólares equivalente.
El objetivo de la operación
Según el Gobierno uruguayo, la operación financiera tenía tres metas:
- Continuar con el programa de fondeo del gobierno para el año 2023.
- Seguir desarrollando el mercado de bonos en pesos nominales a tasa fija, estableciendo un nuevo bono de referencia (benchmark) en un plazo de 10 años.
- Aumentar la madurez promedio de la deuda en moneda local.
Evaluación de las operaciones
Estas son las conclusiones publicadas por el Ministerio de Economía y Finanzas del Uruguay, luego de la operación financiera:
- Esta es la cuarta vez que el gobierno emite un bono en pesos a tasa fija nominal (es decir, sin indexación a la inflación) a escala global.
- La operación implicó una concesión estimada por nueva emisión de menos de 10 puntos básicos (respecto al bono en pesos que cotiza en el mercado con vencimiento 2031)
- La reducción sostenida de la inflación en Uruguay y la robustez del marco de política monetaria del Banco Central de Uruguay fueron elementos importantes que coadyuvaron a alcanzar este volumen de colocación y la tasa de interés obtenida.
- La transacción permite una extensión de la curva de bonos soberana en pesos nominales, estableciendo una nueva referencia indicativa de costos de financiamiento en pesos para el sector público y privado, en el mercado bancario y de capitales.