Bloomberg Línea — La Unión Europea se ha propuesto a frenar la pérdida de biodiversidad con una ley, aprobada en abril, que obliga a las empresas a garantizar que sus productos no provoquen deforestación ni degradación forestal.
El consumo de este mercado representa alrededor del 10% de esta deforestación mundial y entre 1990 y 2020, unas 420 millones de hectáreas de bosques, superficie mayor que la de la UE, pasaron a utilizarse para fines agrícolas, calcula la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Por lo que ahora, esta legislación implica que las empresas que quieran seguir exportando a la UE deben demostrar que sus productos no están vinculados a la deforestación, responsable del 10% del calentamiento global, estima el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
Los productos que cubre la nueva legislación son: el ganado, el cacao, el café, el aceite de palma, la soja y la madera, así como los productos que contengan, se hayan alimentado de o se hayan fabricado con estas materias primas, como el cuero, el chocolate y los muebles, tal y como figuraban en la propuesta original del Parlamento Europeo.
A partir del 29 de junio, grandes y medianas empresas registradas en la UE tienen 18 meses para garantizar que sus productos no se han producido en tierras deforestadas después de 2020.
Esta ley lleva a que las empresas deben construir prácticas de cumplimiento libres de deforestación; adaptar su tecnología para cumplir con las demandas regulatorias, asegurarse de que sus proveedores y distribuidores cumplan con la nueva ley; y cumplir con las leyes y regulaciones agrícolas locales del país productor
La integración de blockchain con innovaciones como inteligencia artificial, satélites e Internet de las cosas (IoT) podría garantizar un mayor grado de transparencia y trazabilidad, propone Dimitra, empresa de agtech con presencia en 60 países que ha desarrollado una plataforma que hace que la evaluación de la deforestación sea accesible para las empresas que demuestran su cumplimiento con las nuevas regulaciones de la UE.
Cómo certificar la reforestación
La plataforma de Dimitra detecta si una parcela de tierra fue deforestada o no y genera un certificado de cumplimiento escrito en blockchain, necesario para cumplir con los requerimientos de la Unión Europea.
“El blockchain, las imágenes satelitales y la inteligencia artificial puedan reducir una gran cantidad de costos y tiempo invertido”, dijo Calvin Fúnez, director nacional de Dimitra en Honduras.
En este proceso de certificación se recolectan imágenes satelitales desde diciembre del 2020 e información del área para hacer un análisis por medio de IA que identifica el porcentaje de deforestación.
“Entonces ya no necesitas una cuadrilla de personas que vaya contando árbol por árbol, que haga el polígono, el tema topográfico, sino que simplemente una imagen satelital, tener la inteligencia artificial que te hace el análisis y también mencionar que es una tecnología a base de blockchain”, dijo Fúnez a Bloomberg Línea.
La cadena de bloques garantiza que cualquier información queda registrada “y no hay manera posible que se cambien las reglas del juego. Entonces eso le da confianza y seguridad al comprador porque hay completa transparencia por el tipo de tecnología”, agregó el ejecutivo hondureño.
Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá son parte del acuerdo de asociación (AdA) con la Unión Europea desde 2012, el cual ha permitido recudir los aranceles, aumentar la eficiencia de los procedimientos aduaneros y contribuir a un crecimiento de 153% de las exportaciones del istmo a la UE, según estimaciones de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca).
En el caso de Honduras, la Unión Europea se ha consolidado como el segundo socio comercial más importante en un 24% de participación, después de Estados Unidos (33%), de acuerdo con el Banco Central (BCH).
“El consumidor ha cambiado sus hábitos. Ahora es más consciente de lo que está comprando y muchos de los productos que consume están generando un alto impacto en el medio ambiente”, dijo Fúnez.
La evaluación de la Comisión Europea estima que al menos 71.920 hectáreas de bosque anualmente (alrededor de 100.000 campos de fútbol) estarán protegidas con esta ley. Como resultado, también se estima que las emisiones globales de carbono se reducirán en 31,9 millones.