Bogotá — Los fondos de pensiones voluntarios nacieron hace cerca de 30 años en Colombia como una opción adicional a los aportes obligatorios, permitiéndoles a las personas complementar su jubilación y tener una mejor entrada de dinero en el futuro.
Estos fondos, gestionados por diversas entidades financieras, ofrecen la posibilidad de realizar aportes regulares o esporádicos, tanto para personas asalariadas como para trabajadores independientes.
Su principal objetivo es fortalecer el valor de la pensión obligatoria y brindar una mayor seguridad económica durante los años de jubilación.
Uno de los principales atractivos de los fondos de pensiones voluntarios es la posibilidad de invertir los recursos en una amplia gama de activos financieros, de acuerdo con el perfil de riesgo de cada persona, explicó a Bloomberg Línea el Ph.D. y profesor asociado en la Facultad de Administración en la Universidad de los Andes, Santiago Rodríguez Raga.
Con esta diversificación se busca obtener una rentabilidad que incremente el valor acumulado a lo largo del tiempo, brindando una oportunidad para mejorar la mesada pensional.
Según Rodríguez Raga, invertir en estos fondos ofrece un beneficio tributario significativo.
Los aportes realizados pueden estar exentos del pago de impuestos, siempre y cuando se respeten ciertos límites de los valores aportados (30% del valor del ingreso) y una permanencia mínima en estos fondos para no perder el beneficio tributario (mantenerlos mínimo 10 años).
“Estos valores acumulados son ahorros que la persona realiza a lo largo de la vida laboral y se pueden retirar para compra de vivienda, sin pérdida del beneficio tributario o para cualquier necesidad, pero con el pago de la retención no realizada en su momento”, dijo el académico.
Estas ventajas fiscales han sido un aliciente para muchos inversionistas, quienes han visto en los fondos de pensiones voluntarios una forma de proteger su patrimonio a largo plazo.
Sin embargo, matizó que en los últimos años los aportes a los fondos de pensiones voluntarios han experimentado una disminución en su popularidad.
Asoció este fenómeno a reformas tributarias implementadas que han limitado el beneficio fiscal, particularmente para las personas de mayores ingresos.
Estas reformas han establecido un valor máximo para los aportes anuales con beneficio tributario, así como un límite para todas las rentas exentas y deducciones posibles.
Explicó que esta situación ha llevado a que muchas personas restrinjan sus aportes a los fondos de pensiones voluntarios y busquen otros productos financieros que cumplan una función similar en cuanto al manejo de inversiones.
En este sentido, los fondos de inversión colectiva (FIC) han surgido como una clara competencia, consideran los expertos.
Estos fondos también ofrecen una amplia variedad de alternativas de inversión, con rentabilidades que varían dependiendo del riesgo asumido por el inversionista.
¿A quiénes les puede convenir realizar aportes en fondos de pensiones voluntarios en Colombia?
Carlos Prieto, profesor y miembro del Observatorio Laboral de la Universidad Javeriana, respondió a Bloomberg Línea que la viabilidad de invertir o no en estos fondos voluntarios dependerá “de una serie de circunstancias que son muy particulares y que están asociadas al perfil de cada afiliado”.
“Por ejemplo, una persona joven, con unos ingresos altos, y con pocas cargas familiares o financieras, verá en la inversión en los fondos de pensiones una muy buena alternativa para capitalizar su dinero y poner a producir algún interés que le beneficie”, manifestó.
Expuso que si es una persona joven, pero sus ingresos no son tan altos, tal vez sea más complejo que pueda hacer este tipo de inversiones.
En el caso de las personas en edad media o madura, opina que también va a ser más difícil que puedan tener unos beneficios considerables, a menos de que tengan unos ingresos muy altos o que tengan ingresos adicionales a sus rentas de trabajo.
Prieto destaca que otro elemento clave a considerar es el tipo de riesgo que se asume en el fondo, pues si se trata del esquema bajo o moderado, la inversión también se comportará de la misma manera.
“Mientras que si es un nivel de mayor riesgo, eventualmente puede llegar a tener una mayor utilidad, desde luego, pero corriendo con el riesgo financiero del portafolio que adquiera”, complementó.
El experto recalcó que, dado que cada caso es particular y tiene sus diferencias, la mejor forma de comprobarlo es contar con la asesoría especializada que pueden brindar los mismos fondos de pensiones.
En última instancia, invertir en fondos de pensiones voluntarios o en otros productos financieros dependerá de las circunstancias individuales.
Si bien estos fondos siguen siendo una opción atractiva para aquellos que buscan complementar su pensión obligatoria y aprovechar los beneficios fiscales, las limitaciones impuestas pueden generar dudas a los inversores.
Los inversionistas deben evaluar cuidadosamente su situación financiera, sus objetivos a largo plazo y su tolerancia al riesgo antes de decidir si los fondos de pensiones voluntarios son la mejor opción para ellos.
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