General ruso cuestionado por la rebelión mercenaria de Prigozhin está desaparecido

Sergei Surovikin, también conocido como el “General Armagedón” por sus tácticas despiadadas en Siria, no ha sido visto en público desde el motín de corta duración

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Bloomberg — Un prominente general ruso que ha sido cuestionado por el fallido alzamiento llevado a cabo por el grupo mercenario Wagner no estuvo presente en una reunión de los principales jefes del ejército, en la que el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, denunció la rebelión.

Sergei Surovikin, también conocido como el “General Armagedón” por sus tácticas despiadadas en Siria, no ha sido visto en público desde el motín de corta duración que terminó el 24 de junio.

Según una persona con conocimiento del asunto, fue cuestionado por sus vínculos con el líder mercenario, Yevgeny Prigozhin, a lo largo de varios días en una ubicación no especificada.

El “intento de desestabilizar la situación en Rusia” fracasó porque las fuerzas armadas “se mantuvieron fieles a su juramento”, dijo Shoigu a los oficiales en la reunión del Ministerio de Defensa transmitida el lunes por la televisión estatal, en sus primeros comentarios públicos sobre el levantamiento. “La provocación no afectó” a las operaciones militares de Rusia en Ucrania, dijo.

La insurrección del otrora aliado del presidente Vladimir Putin se convirtió en la mayor amenaza para los 24 años de gobierno del líder ruso y ha dejado preguntas sin respuesta sobre hasta qué punto algunos elementos del ejército podían conocer de antemano los planes de Prigozhin. Las fuerzas de Wagner se acercaron a 200 kilómetros de Moscú sin apenas oposición, antes de detener su avance después de que el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, mediara en un acuerdo para poner fin a la crisis.

En virtud de ese acuerdo, Putin se comprometió a permitir a Prigozhin trasladarse a Bielorrusia, así como a cualquier combatiente de Wagner que quisiera unirse a él. También se cerraron las investigaciones penales contra Wagner por acusaciones de sublevación armada.

Aunque Lukashenko dijo la semana pasada que Prigozhin había llegado a Bielorrusia, no se ha vuelto a ver al fundador de Wagner desde finales del 24 de junio y todos sus canales en las redes sociales han enmudecido.

Shoigu no mencionó el número de combatientes de Wagner que habían aceptado firmar contratos con el Ministerio de Defensa antes de la fecha límite del 1 de julio, que fue la chispa que desencadenó el motín. Prigozhin había acusado a Shoigu de intentar “destruir” a Wagner, cuyas tropas han desempeñado un papel clave en la guerra de Rusia en Ucrania, especialmente en los combates por la ciudad oriental de Bakhmut.

Hay otros indicios de que el legado de Prigozhin en Rusia está siendo desmantelado. Sus operaciones en los medios de comunicación rusos se están liquidando y los sitios web pertenecientes a su grupo “Patriot” han sido bloqueados por los reguladores, según informó el viernes el diario Izvestia.

El ejército ucraniano sigue adelante con su contraofensiva para recuperar las zonas del sur y el este de Ucrania ocupadas por las fuerzas rusas. Putin anunció en septiembre que Rusia se anexionaba cuatro regiones de Ucrania, aunque sus tropas no controlan totalmente los territorios.

El presidente mantuvo una reunión televisada el lunes con la jefa del comité electoral central de Rusia, Ella Pamfilova, quien le dijo que había planes para celebrar elecciones regionales en las regiones ocupadas de Ucrania en septiembre, aunque las votaciones podrían aplazarse si la situación se deterioraba.

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