Bloomberg — Cada vez más chinos consideran que sus ingresos están disminuyendo y esperan que los precios de la vivienda caigan en los próximos tres meses, una señal preocupante para la economía en dificultades, ya que probablemente socavará la demanda de vivienda y perjudicará a la actividad constructora.
El indicador que mide la opinión de los ciudadanos sobre sus ingresos cayó a 49,7, y cerca de una sexta parte de los encuestados afirmó haber ganado menos dinero en el trimestre actual que en los tres primeros meses del año, según una encuesta periódica entre depositantes realizada por el banco central. El indicador se desplomó el año pasado, cuando el país entró en bloqueo, antes de repuntar de nuevo en el periodo enero-marzo.
Casi el 17% de la gente espera que los precios de la vivienda caigan en China el próximo trimestre. Esta cifra es superior al 14,4% de personas que afirmaron lo mismo en la encuesta del trimestre pasado. Alrededor del 16% de la gente ve que los precios de la vivienda subirán, por debajo del 18,5% del trimestre pasado, mientras que el 54,2% los ve sin cambios, básicamente lo mismo que el trimestre pasado.
La construcción de viviendas es un sector crítico para la economía, en crisis desde hace unos dos años: caída de los precios y de la construcción, morosidad de los promotores inmobiliarios, muchos pisos vacíos y sin vender, y algunos propietarios que se niegan a pagar sus hipotecas. El banco central y los gobiernos locales están actuando para recortar los tipos y reducir las restricciones a la compra para intentar impulsar la demanda, pero aún hay pocos indicios de un repunte de la demanda de nuevas viviendas.
El sector inmobiliario experimentó un ligero repunte en el primer trimestre, con un crecimiento del 1,3% por primera vez en más de un año, pero la gente sigue siendo reticente a pedir préstamos para comprar casas nuevas. El año pasado, los bancos concedieron la menor cantidad de préstamos a largo plazo a los hogares en casi una década, y el endeudamiento descendió otro 13% en los cinco primeros meses de este año, lo que indica que menos personas están suscribiendo nuevas hipotecas.
Esta debilidad de la demanda inmobiliaria se está trasladando a otras industrias que abastecen al sector, como las del acero, el vidrio o los equipos de construcción: las ventas de excavadoras cayeron un 44% en los cinco primeros meses de este año con respecto al mismo periodo de 2022, tras un descenso del 45% el año pasado.
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