Ciudad de México — El Gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), continuará aplicando un controvertido programa de regularización de automóviles ilegales, en medio de una demanda por autos nuevos que ya supera los niveles prepandémicos.
Los autos chocolate, aquellos que entraron al país de manera ilegal y que AMLO regulariza desde mediados de marzo de 2022 por seguridad, superan al número de automóviles nuevos comercializados en México en los últimos 15 meses, aproximadamente desde que el Gobierno comenzó el programa de regularización.
La venta de automóviles nuevos enfrentó presiones desde finales de 2021 y buena parte de 2022 ante la escasez de chips, generando incluso listas de espera de compradores, que poco a poco han podido concretar sus compras.
Los concesionarios automotrices han vendido 1,4 millones vehículos entre marzo de 2022 y mayo de 2023. Las ventas de autos nuevos han superado los niveles previos a la llegada del Covid-19 y desde agosto del 2022 registran crecimientos anuales de doble dígito.
Los datos de ventas de junio se darán a conocer el próximo 4 de julio, pero el sector estima que se venderán 96.640 unidades, lo que implicaría la comercialización de 1,54 millones durante los últimos 15 meses.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad Ciudadana de México ha regularizado 1,58 millones autos chocolate del 19 de marzo de 2022 al 26 de junio de 2023, dijo la secretaria Rosa Icela Rodríguez, durante la conferencia de AMLO del 27 de junio. El programa se aplica únicamente en 16 estados del país.
Esta cifra continuará creciendo. El Gobierno anunció el martes 27 de junio que ampliará por quinta ocasión el programa, debido a las listas de espera. La nueva fecha de finalización es el 29 de septiembre de 2023.
El programa tiene como objetivo poner en orden a aquellas unidades que ingresaron ilegalmente a México antes del 19 de octubre de 2021.
Los vendedores de automóviles nuevos sospechan que ese requisito no es revisado por las autoridades, generando un incentivo a un mayor entrada de vehículos usados ilegales, que anticipan podrán regularizarse con el pago de una cuota de MXN$2.500, aproximadamente US$150.
“No es posible que después de casi 1,6 millones de vehículos regularizados sigan ingresando diariamente vehículos en contrabando, habiendo lista de espera y ninguna penalización clara para los propietarios que no legalicen sus unidades, por lo que este fenómeno continuará como una regularización sin fin”, dijo Guillermo Rosales.
