Bloomberg — Minneapolis y Honolulu se convirtieron en las primeras grandes ciudades estadounidenses en ver cómo la inflación volvía a situarse en línea con el objetivo nacional de la Reserva Federal (2%) desde que comenzó la subida de precios pandémica en 2021.
Los precios en Minneapolis subieron sólo un 1,8% en los 12 meses transcurridos hasta mayo, mientras que en la zona urbana de Hawái la cifra fue del 2%, según la Oficina de Estadísticas Laborales. Ambas regiones experimentaron grandes descensos en el costo de la energía doméstica y del combustible para motores.
El objetivo de inflación de la Reserva Federal es del 2%, aunque utiliza un indicador de precios diferente que no es directamente comparable con las cifras del buró de estadísticas. Aun así, los datos publicados el martes muestran un enfriamiento de la inflación en todo EE.UU. La tasa anual a escala nacional se redujo al 4%, el nivel más bajo desde marzo de 2021. Los inversores aumentaron las apuestas a que los funcionarios de la Reserva Federal, que llevan más de un año subiendo las tasas de interés para frenar los precios, interrumpirán su racha de subidas cuando se reúnan esta semana.
En algunas de las mayores ciudades de EEUU se ha producido una fuerte desaceleración de los precios. En Nueva York, la mayor área metropolitana, la tasa de inflación bajó al 3,5%, desde un máximo posterior a la pandemia del 6,7% en junio de 2022. El cambio fue aún mayor en Los Ángeles y Chicago, que tenían tasas del 8,5% o más en el pico, y ahora tienen una inflación algo superior al 3%.
Siguen existiendo focos de inflación en EE.UU., especialmente en algunas zonas del Cinturón del Sol, aunque incluso allí se ha producido una notable relajación respecto a las tasas que llegaron a alcanzar el 13% el verano pasado.
Tampa, Florida, que lleva más de dos años a la cabeza de la liga nacional de la inflación o cerca de ella, siguió teniendo el mes pasado la tasa más alta entre las grandes ciudades, con un 7,3%.
El gobierno hace un seguimiento de los precios en 23 áreas metropolitanas, en las que Nueva York, Los Ángeles y Chicago informan de la inflación todos los meses y las demás ciudades alternan cada dos meses.
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