Bloomberg — Los inversores de Tesla Inc. (TSLA) que se mantuvieron fieles al fabricante de vehículos eléctricos durante un periodo difícil ven ahora días más brillantes. Las acciones podrían duplicar su valor este año, gracias a una serie de acontecimientos positivos y a la renovada confianza del mercado.
En el transcurso de 11 días, Tesla ha experimentado un notable aumento de su valoración de mercado, disparándose en más de US$200.000 millones. Esta racha de ganancias podría igualar la más larga de la historia de la empresa si las ganancias del viernes se mantienen hasta el final de la sesión bursátil. Este logro supondría la segunda vez en la historia de Tesla que se consigue una hazaña semejante.
Bespoke Investment Group informa de que, a pesar de su historial de volatilidad, Tesla sólo ha tenido otras dos rachas de ganancias de dos dígitos. La primera se produjo durante 10 días de negociación en abril de 2020, mientras que la segunda, y la más larga, tuvo lugar menos de un año después, en enero de 2021.
Las acciones de Tesla saltaron hasta un 7,5% a US$252,42 el viernes, lo que eleva la subida de este año al 103%. El avance del 17% de esta semana hasta ahora va camino de ser el mejor desde enero.
El fuerte repunte del viernes se produce después de que General Motors Co. (GM) dijera el jueves que adaptará sus vehículos eléctricos a los Supercargadores de Tesla, siguiendo un movimiento similar de Ford Motor Co. (F) y casi asegurando que se convertirá en un estándar de la industria en los EE.UU..
“Más gente comprando vehículos eléctricos (ya sean de GM o de Ford) aumenta la probabilidad de que compren Teslas”, escribió el analista de RBC Capital Markets Tom Narayan en una nota el jueves. “Una marea creciente levanta todos los barcos y si los consumidores ven que su vecino tiene un EV, es más probable que compren uno ellos mismos - y esto aumenta las posibilidades de que compren un Tesla.”
Con todo, ésta es sólo la última de una serie de noticias relacionadas con los vehículos eléctricos que han contribuido a las rápidas ganancias de Tesla desde finales de mayo.
A principios de esta semana, todas las berlinas Model 3 de Tesla pudieron optar a la totalidad de la desgravación fiscal estadounidense en virtud de los nuevos criterios establecidos por el Departamento del Tesoro de EE.UU., mientras que Twitter, la plataforma de redes sociales de Musk, ha nombrado a un nueva CEO, lo que ha calmado el malestar de algunos inversores por la excesiva dispersión de Musk entre sus numerosas empresas de alto perfil.
Y luego está el frenesí del mercado por todo lo relacionado con la inteligencia artificial, que alimentó aún más un sentimiento ya boyante por la tecnología y los valores de gran capitalización, y empujó al índice S&P 500 al territorio del mercado alcista.
Aunque todavía no se sabe si la rica valoración de Tesla permite un mayor impulso relacionado con la IA, o si incluso la tecnología de conducción autónoma que está desarrollando puede equipararse a la tendencia de la IA generativa, no cabe duda de que el valor se ha contagiado de la fiebre.
De hecho, Cathie Wood, ferviente defensora de Tesla y consejera delegada de ARK Investment Management, ha afirmado que la empresa es la mayor apuesta por la IA, lo que contribuirá a que el precio de sus acciones suba hasta los US$2.000 en 2027. Sin ese impulso de la IA, Wood espera que las acciones valgan sólo unos US$400 para esa misma fecha.
Los inversores particulares, entre los que Tesla goza de un estatus de culto, están claramente escuchando.
Según datos de Vanda Research, la AI-manía ha ayudado a que los inversores particulares vuelvan al juego después de una pausa de 3 meses, con un flujo medio de US$1.360 millones al día en los mercados de EE.UU. durante la última semana hasta el jueves.
“Los datos económicos mejores de lo esperado y la resolución del techo de la deuda fueron algunos de los principales motores macroeconómicos de este repunte de la participación, pero el empuje de la IA es lo que ha impulsado decisivamente los espíritus animales en las últimas semanas”, escribieron Marco Iachini y Giacomo Pierantoni de Vanda en una nota a los clientes.
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