Bloomberg — Este fin de semana, en un discurso pronunciado en la Universidad Nacional de Taiwán, Jensen Huang, el CEO de Nvidia, compartió la filosofía que ha llevado a su empresa a lograr el billón de dólares de capitalización bursátil.
“Corran, no caminen”, dijo. “O corren para conseguir comida, o corre para no convertirte en comida”.
La premura de Huang (y su voluntad de asumir riesgos que otras empresas gobernadas por comités no se atreven a asumir) es lo que llevó a Nvidia Corp (NVDA), el fabricante de chips de Silicon Valley que fundó hace 30 años, a hacer grandes apuestas en inteligencia artificial años antes de que nadie más se la tomara en serio. Hoy está demostrando ser la gallina de los huevos de oro de la empresa.
Las acciones se han disparado desde la semana pasada, cuando Nvidia dio una previsión de ventas impulsada por la IA que hizo añicos las estimaciones de Wall Street. La empresa de Silicon Valley alcanzó este martes la marca del billón de dólares y se unió a un puñado de empresas, como Alphabet Inc (GOOGL), Amazon.com Inc (AMAZN) y Apple Inc (AAPL) en llegar a una valoración tan alta. Menos de 10 empresas de todo el mundo han alcanzado este nivel.
No todo el mundo es igual de optimista. En una entrevista con Bloomberg TV el viernes, Cathie Wood, cuyo fondo insignia ARK Innovation ETF redujo su participación en Nvidia en enero, advirtió que los ciclos de auge y caída del sector de los chips informáticos plantean riesgos. “Hay algunas razones por las que nos tomamos una pausa”, dijo, con la creciente competencia entre empresas por una parte del mercado de la IA.
Con bombo y platillo o sin él, ninguna otra empresa encarna mejor que Nvidia la actual obsesión de Wall Street por la IA. Se ha convertido en el mayor fabricante del mundo de los chips especializados necesarios para impulsar una nueva generación de productos de IA, superando en capacidad a Advanced Micro Devices Inc. (AMD) e Intel Corp. (INTC) justo cuando el éxito viral de ChatGPT ha hecho que prácticamente todas las empresas del mundo incorporen la IA a sus operaciones.
Nvidia está “en la pole position ahora mismo”, afirma Zeno Mercer, analista de investigación senior de ROBO Global. “Está proporcionando realmente la tecnología necesaria para dar servicio a esta ola de innovación y utilización”.
A Nvidia se le da bien aprovechar las tendencias tecnológicas: vende chips gráficos que impulsaron todo, desde el boom de los videojuegos hasta el auge de las criptomonedas y la gran apuesta de la industria por el metaverso. Pero podría decirse que ninguna tendencia beneficiará más a la empresa de chips más valiosa del mundo que el auge de la inteligencia artificial. La semana pasada, la empresa emitió una previsión de ventas impulsadas por la IA de US$.000 millones en el segundo trimestre fiscal, haciendo saltar por los aires los objetivos de Wall Street y aumentando su valor en US$184.000 millones en un solo día.
“Nunca hemos visto una guía como la que acaba de publicar Nvidia”, dijo entonces Stacy Rasgon, analista de Sanford C. Bernstein.
Nvidia fue cofundada en 1993 por Huang. Tuvo más éxito que sus competidores en el desarrollo de chips que convierten el código informático en las imágenes realistas que adoran los jugadores de ordenador, y superó una ola de consolidación en la que sus rivales fueron adquiridos, quebrados o fusionados en empresas mayores.
Bajo la dirección de Huang, la empresa introdujo su tecnología en nuevos mercados, como los servidores de centros de datos y el procesamiento de inteligencia artificial, un movimiento que está resultando clarividente hoy en día. En menos de una década, el negocio de centros de datos de Nvidia ha pasado de unos ingresos anuales de US$300 millones a us$15.000 millones. El fabricante de chips ha conseguido pedidos para equipar gigantescas fábricas de computación argumentando con éxito que los chips gráficos pueden gestionar las cargas de trabajo de IA mejor que los procesadores más estándar.
Se ha convertido en algo habitual que las empresas tecnológicas hablen de sus perspectivas de inteligencia artificial durante las conferencias telefónicas sobre beneficios. Las referencias a la IA se dispararon tras el lanzamiento de ChatGPT en noviembre, y no siempre provocan una subida de las acciones. Pero Nvidia se ha convertido ahora en el modelo de empresa que realmente gana dinero con la IA. Es el vendedor de picos y palas en la analogía de la fiebre del oro.
El éxito de Nvidia ha hecho que los inversores se muestren aún más pesimistas respecto a Intel, pionera de Silicon Valley y la empresa más sinónima de chips informáticos. Mientras que muchos fabricantes de chips vieron subir sus acciones tras el éxito de los beneficios de Nvidia la semana pasada, Intel cayó. La valoración de Nvidia es ahora más de ocho veces la de Intel, a pesar de que la empresa tiene muchos menos ingresos.
Con la asistencia de Joel Leon, Farah Elbahrawy y Michael Msika.
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