Bloomberg — La situación de los incendios forestales en Alberta, la principal provincia productora de energía de Canadá, siguió siendo inestable el sábado, mientras que las interrupciones de la producción de petróleo y gas hacen que los compradores se enfrenten ahora a recortes de suministro.
Al menos dos compradores fueron notificados esta semana de fuerza mayor y recortes del 5% o más en sus entregas de crudo canadiense de bajo contenido en azufre este mes, según personas familiarizadas con el asunto. Pembina Pipeline Corp. también declaró fuerza mayor en su sistema Peace Pipeline, que transporta líquidos de gas natural desde los yacimientos de petróleo y gas del oeste hasta la zona de Edmonton, según dos personas que recibieron la notificación.
Según estimaciones de la consultora Rystad Energy, los incendios han paralizado la producción diaria de petróleo y gas equivalente a unos 240.000 barriles, y quizá más de 300.000 barriles. El sábado por la noche ardían en Alberta un total de 86 incendios forestales, siete menos que el viernes, mientras que el número de focos fuera de control se mantuvo en 26, según datos provinciales.
Más de 2.800 bomberos de Canadá y Estados Unidos trabajan sobre el terreno para hacer frente a unas condiciones calurosas, secas y racheadas, según informó el sábado Christie Tucker, portavoz de Alberta Wildfire.
En los próximos días se prevén lluvias y un tiempo más fresco, pero mucho depende de dónde caiga la lluvia. “Aunque los chubascos serán bien recibidos por los bomberos, vigilamos las tormentas con mucha atención”, dijo Tucker, ya que los rayos podrían provocar nuevos incendios.
El jueves, un incendio forestal cruzó la autopista 43 cerca de Fox Creek, 260 kilómetros al noroeste de Edmonton, y las llamas seguían cerca de la localidad, dijo Tucker. La zona es un importante centro de perforación de petróleo ligero y gas en la formación de esquisto Duvernay.
Las perturbaciones ya están afectando a los inventarios de petróleo en un centro crítico. Según el proveedor de datos geoespaciales Ursa Space Systems, los depósitos de Edmonton, más cercano a las llamas que Hardisty, el otro gran centro de Alberta, almacenaban 18,1 millones de barriles el 13 de mayo. Esta cifra es inferior a los 19,7 millones de principios de mayo. Los volúmenes en Hardisty se mantienen estables.
La situación también empieza a pesar en las previsiones económicas para Canadá. ATB Financial estimó el viernes que los infiernos podrían recortar entre un 0,1% y un 0,3% el producto interior bruto real del país este mes.
Hasta ahora, las llamas han afectado sobre todo a la región productora de gas del oeste de Alberta, aunque ConocoPhillips informó de algunas evacuaciones breves en su yacimiento de arenas petrolíferas de Surmont.