Bloomberg — El petróleo se desploma por segundo día consecutivo este miércoles, cayendo el WTI por debajo de los US$70 por barril en medio de perspectivas más sombrías sobre la economía de EE.UU. y la consecuencia huida hacia activos refugio.
Días después de que la OPEP+ comenzara a recortar la producción con el objetivo de estabilizar los mercados, no hay muchos indicios de que la decisión esté reportando frutos.
Los futuros del petróleo cayeron a su nivel más bajo desde marzo, cuando los primeros indicios de la crisis bancaria en el país norteamericano hicieron caer los precios. Este miércoles surgieron nuevas señales en este sentido.
“Los temores a una desaceleración económica más amplia” están impulsando el mercado, dijo Joe DeLaura, estratega senior de energía de Rabobank, en una nota. El crudo Brent, que cotizaba cerca de los US$80 el barril el martes, será el siguiente en poner a prueba los US$70, dijo.
El crudo ha tenido un duro camino en 2023 a pesar de la reaparición de China de su política de Cero Covid y considerables reducciones en el suministro por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados. Estos recortes sorpresa, anunciados hace apenas un mes, debían devolver el control del mercado a los especuladores bajistas. Sin embargo, el breve repunte de abril se ha desvanecido.
“Con los vendedores en corto de nuevo al mando, los precios podrían volver a dispararse a la baja”, afirmó Ole Sloth Hansen, responsable de estrategia de materias primas de Saxo Bank A/S. “Se espera que la Fed vuelva a subir las tasas hoy más tarde, y eso sigue pesando en las perspectivas de la demanda”.
En EE.UU., los datos del Instituto Americano del Petróleo, financiado por la industria, ofrecieron un panorama desigual sobre el estado actual de la oferta y la demanda. Los inventarios nacionales de crudo se redujeron en casi 4 millones de barriles la semana pasada y los de destilados también cayeron, pero se produjo una acumulación de crudo en el centro clave de Cushing, Oklahoma, según personas familiarizadas con las cifras. Los datos oficiales del Gobierno se publicarán el miércoles.
En Rusia, mientras tanto, no hubo señales de una caída sostenida de los flujos de crudo fuera del país, a pesar de su promesa de recortar la producción en 500.000 barriles diarios. Las exportaciones volvieron a superar los 4 millones de barriles diarios en la semana hasta el 28 de abril, un nivel sólo superado una vez desde que las tropas de Moscú invadieron Ucrania en febrero de 2022, según los datos de seguimiento de petroleros recopilados por Bloomberg.
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