Bloomberg — Un grupo de inversores de Tesla Inc. (TSLA) ha acusado a la compañía de desmanejos y quiere una reunión con su junta directiva para hablar sobre el rendimiento de su CEO, Elon Musk.
En concreto, estos 17 accionistas, cuyas tenencias combinadas ascienden a US$1.500 millones, dicen que el CEO está distraído por sus compromisos con otras compañías y deben tomarse acciones al respecto.
En una carta a la presidenta de la junta, Robyn Denholm, y el director Ira Ehnrenpreis, pidieron un plan y la remoción de directores muy cercanos a Musk.
“Hay frustración colectiva”, dijo Ivan Frishberg, responsable de sostenibilidad de Amalgamated Bank, que tiene 722.070 acciones de Tesla en sus distintos fondos. “En el último año, quedó bastante claro que Tesla sufre un problema de gobernanza”.
Aunque las quejas sobre gobernanza no son nada nuevo para Tesla, no hacen sino engrosar la lista de retos a los que se enfrenta el fabricante de vehículos eléctricos. A principios de esta semana, la empresa informó de unos resultados mediocres en el primer trimestre después de que los agresivos recortes de precios que emprendió para defenderse de sus competidores redujeran sus beneficios. Musk dijo que planea recortar aún más los precios, incluso si eso perjudica los márgenes, lo que hizo que las acciones se desplomaran más de un 10% el jueves. Sin embargo, el viernes reculó y anunció una subida de precios.
Amalgamated Bank, los fondos de pensiones de la ciudad de Nueva York y otros firmantes de la carta quieren que Musk se centre para que pueda navegar por el mercado cada vez más competitivo de los vehículos eléctricos y el escrutinio regulatorio. La empresa se enfrenta a investigaciones del Departamento de Justicia de EE.UU., la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras y el Departamento de Vehículos Motorizados de California sobre su sistema de piloto automático.
El fabricante de automóviles con sede en Austin, Texas, tiene ahora la mitad de su capitalización de mercado de US$1,2 billones del 4 de abril de 2022, cuando Musk reveló por primera vez su participación en Twitter Inc, señalaron los inversores. Finalmente compró la compañía de medios sociales y la ha dirigido desde octubre.
“No tiene precedentes ser CEO y dirigir otras dos empresas al mismo tiempo”, dijo Courtney Wicks, directora ejecutiva de Investor Advocates for Social Justice, que representa a varios inversores religiosos. “No me imagino a ningún otro consejo que permita a un CEO tener tantas actividades empresariales externas”.
A principios de este año, otro inversor de Tesla -que no está asociado con la carta- presentó una resolución pidiendo a la compañía que creara un plan para abordar su dependencia de Musk. El consejo de Tesla ha recomendado a los accionistas que voten en contra de la propuesta en la junta anual de la empresa del 16 de mayo. Si bien este tipo de resoluciones no suelen tener éxito, el bajo rendimiento reciente de las acciones del fabricante de automóviles puede desanimar a los inversores que, de otro modo, se inclinarían por la empresa.
Algunos de los accionistas que firmaron la carta han presentado resoluciones a la junta anual de la empresa en el pasado. El poder de este año contiene sólo una resolución, por debajo de las ocho de 2022, en gran parte porque la noticia de que Tesla iba a reprogramar la reunión quedó oculta en una presentación regulatoria.
La carta continúa con una lista de otras cuestiones que los inversores argumentan que ponen a la compañía en riesgo. Entre ellos: el litigio de la empresa con el estado de California sobre el trato a los empleados negros en la fábrica de Tesla en Fremont, el uso del arbitraje obligatorio y el despido de empleados que participaron en un esfuerzo de organización sindical en Buffalo, Nueva York.
El grupo también criticó a Tesla por abrir una sala de exposiciones en Urumqui, capital de la Región Autónoma Uigur de Xinjiang, en China. Activistas y políticos han acusado a China de cometer abusos contra los derechos humanos en la zona.
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