Bloomberg — Los directivos negros y latinos de BlackRock Inc. (BLK) renuncian tan rápidamente que casi contrarrestan los esfuerzos de la empresa de Wall Street por diversificar sus filas, según una auditoría realizada por el ex fiscal general de Estados Unidos Eric Holder y el bufete de abogados en el que es asesor principal.
La retención se identificó como uno de los retos de BlackRock, aun cuando la mayor gestora de dinero del mundo cumplió algunos objetivos de diversificación de su plantilla global desde 2020, según la revisión de Covington & Burling LLP, que fue contratada por BlackRock para realizar la auditoría.
Según el informe de 74 páginas, las tasas de desgaste de los altos cargos negros casi igualaron el aumento de las contrataciones, con lo que la representación de los altos cargos negros se mantuvo prácticamente estable el año pasado. El desgaste también afectó a la plantilla latina que, combinada con la contratación, dio como resultado un avance de sólo el 0,5% en la representación latina en la empresa. Las cifras de BlackRock son coherentes con la “Gran Resignación” general que está afectando al sector de los servicios financieros, según el informe.
La primera auditoría racial de la historia de la empresa también reveló que BlackRock ya ha alcanzado su objetivo para 2024 de aumentar en un 30% el número total de empleados negros y latinos en EE.UU.. Los trabajadores negros son ahora el 7,8% y los latinos el 7,7%. También afirma que la empresa de inversiones ha progresado en la consecución de sus objetivos de líderes negros e hispanos. Sin embargo, a finales del año pasado, aún le faltaban unos 77 directivos para alcanzar el objetivo de duplicar el número de directivos negros y latinos hasta 280 en 2024.
Los resultados son “un indicio de que BlackRock se toma en serio el proceso”, lo cual es una buena señal, dijo Renaye Manley, subdirectora de iniciativas estratégicas del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios, que hizo la propuesta de auditoría racial en 2021.
Tras el asesinato de George Floyd a manos de la policía en mayo de 2020, los grupos de accionistas han presionado cada vez más a las empresas para que realicen auditorías raciales a fin de comprobar si contribuyen a la discriminación. Las auditorías analizan los modelos empresariales de las empresas (desde las políticas hasta los productos y servicios) para determinar si causan, refuerzan o perpetúan la discriminación. También hacen recomendaciones para mejorar las perspectivas de los grupos infrarrepresentados, en particular los empleados y dirigentes negros.
Se esperan unos 20 informes el año que viene de empresas como State Street Corp. (STT), McDonald’s Corp. (MCD) y Apple Inc. (AAPL) Entre las empresas que ya han completado las auditorías se encuentran Citigroup Inc (C), JPMorgan Chase & Co. (JPM) y la empresa matriz de Google, Alphabet Inc. (GOOGL).
El CEO de BlackRock, Larry Fink, ha dicho que su empresa se encuentra atrapada entre los inversores que insisten en que se preste más atención a los denominados principios medioambientales, sociales y de gobernanza, y los que afirman que los objetivos ESG perjudican la rentabilidad de las inversiones y distraen a las empresas de sus beneficios.
El miércoles, el grupo conservador America First Legal dijo que había presentado una queja ante la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo de EE.UU. pidiendo a la agencia federal que abriera una investigación de derechos civiles sobre si la beca de prácticas BlackRock Founders Scholarship para estudiantes de minorías es discriminatoria para los estudiantes no pertenecientes a minorías.
BlackRock afirma que sus decisiones de contratación y promoción se basan exclusivamente en los méritos. La empresa contrata cada año a más de 1.000 licenciados y becarios que representan a cientos de universidades, y la Beca Founders es sólo una opción, según la portavoz Ashley Beale. En una publicación en Internet, BlackRock afirmó que la auditoría recientemente concluida muestra tanto los avances que ha logrado la empresa como las sugerencias de mejora.
“El informe pone de relieve nuestros importantes avances hasta la fecha”, afirmó Beale. “De cara al futuro, aún nos queda trabajo por hacer y seguimos comprometidos con nuestra estrategia”.
BlackRock, que tiene US$9,1 billones de activos bajo gestión, dijo en marzo de 2022 que había contratado a Covington, junto con la consultora de DEI Working Ideal, para evaluar sus esfuerzos y hacer recomendaciones. La empresa, con sede en Nueva York, está inmersa en un compromiso plurianual en tres partes para mejorar la diversidad interna y ampliar su equidad racial en Estados Unidos.
Según los datos de bajas de BlackRock desde principios de 2021 hasta finales del año pasado, las renuncias voluntarias afectan más gravemente a los empleados negros del nivel de director gerente, seguidos por los del nivel de asociado, dice el informe de Covington. Para los profesionales latinos, el abandono voluntario es mayor en el nivel de asociado, seguido del nivel de vicepresidente.
BlackRock formó un grupo de trabajo el pasado mes de julio para evaluar las razones de las tasas de abandono de los directivos clave y determinó que los directivos que se marchaban citaban la ausencia de un camino claro hacia adelante, lagunas en el sentido de confianza y pertenencia, y experiencias cotidianas incoherentes debido a la falta de responsabilidad de los directivos. Covington dijo que sus propias evaluaciones reflejaban esas conclusiones.
El objetivo de la auditoría racial es establecer una línea de base para la mejora y el compromiso continuo, dijo Manley, del SEIU.
“Queremos que BlackRock aproveche la amplia y diversa reserva de talento que existe”, dijo. “Y si tienen problemas para atraer y retener el talento, como dice el informe, tienen que desarrollar procesos internos más sólidos para asegurarse de que se interrumpe esta pauta.”
Con la asistencia de Saijel Kishan.
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