Bloomberg — El presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, afirmó que, aunque el sector bancario se ha estabilizado tras el segundo mayor colapso bancario de la historia de EE.UU., las recientes tensiones pueden dificultar el acceso al crédito de hogares y empresas.
“El sistema bancario es sólido y resistente”, dijo Williams el miércoles en unas declaraciones preparadas para un acto organizado por la Money Marketeers of New York University. “No obstante, estos acontecimientos conducirán probablemente a un cierto endurecimiento de las condiciones de crédito para hogares y empresas, lo que a su vez pesará sobre el gasto”.
Demasiado pronto
“Aún es demasiado pronto para calibrar la magnitud y duración de estos efectos, y seguiré de cerca la evolución de las condiciones crediticias y sus posibles efectos sobre la economía”, afirmó.
La quiebra del Silicon Valley Bank el mes pasado y la consiguiente agitación de los mercados obligaron a la Reserva Federal y a otros reguladores a tomar medidas de emergencia para apuntalar la confianza proporcionando liquidez al sector bancario en general.
“El uso de la ventanilla de descuento y el programa especial que hemos puesto en marcha están haciendo exactamente lo que queríamos”, dijo Williams.
A pesar de las tensiones bancarias, los responsables de la Reserva Federal subieron los tipos de interés en un cuarto de punto en su reunión del 21 y 22 de marzo, prolongando su campaña de endurecimiento de un año para sofocar la elevada inflación.
La medida situó el objetivo de su tipo de referencia entre el 4,75% y el 5%, frente al nivel cercano a cero del año anterior. Según las proyecciones publicadas al mismo tiempo, los tipos de interés subirán hasta una media del 5,1% a finales de año, lo que supone una nueva subida de 25 puntos básicos.
Según los precios de los contratos de futuros, se espera que los responsables políticos suban los tipos otro cuarto de punto cuando vuelvan a reunirse los días 2 y 3 de mayo.
Un informe publicado por separado por la Reserva Federal el miércoles mostraba que la economía estadounidense se había estancado en las últimas semanas, con una ralentización de la contratación y la inflación y un menor acceso al crédito tras las recientes tensiones bancarias. Es probable que la encuesta del Libro Beige refuerce las posibilidades de que los responsables políticos de la Reserva Federal pongan en pausa su serie de subidas de los tipos de interés tras el aumento previsto para mayo.
Williams también afirmó que la inflación es demasiado alta y que los responsables utilizarán la política monetaria para combatirla.
“Confío en que alcanzaremos y mantendremos una postura lo suficientemente restrictiva como para reducir la inflación a nuestro objetivo a largo plazo del 2%”, dijo, al tiempo que señaló que la inflación se ha moderado recientemente y “los datos más recientes indican que esta tendencia de desaceleración de la inflación continúa”.
“Aunque hay algunos indicios de un enfriamiento gradual de la demanda de mano de obra, el mercado laboral sigue muy ajustado”, dijo.
El jefe de la Fed de Nueva York dijo la semana pasada que las previsiones de marzo de los responsables políticos, que pedían una subida más de los tipos de interés este año, seguida de una pausa, es un “punto de partida razonable”. Sin embargo, subrayó que la senda de los tipos dependerá de los datos económicos que vayan llegando.
Los economistas de la Fed prevén una leve recesión a finales de este año, según mostraron las actas de la reunión del banco central del mes pasado, pero Williams dijo que era un poco más optimista.
“Todavía espero que el crecimiento sea positivo este año, para el cuarto trimestre al cuarto trimestre el crecimiento del PIB, pero realmente modesto”, el jefe de la Fed de Nueva York más tarde dijo a los periodistas. “Ahí es donde salgo equilibrando una economía que parece tener todavía un buen impulso, pero entre los efectos de una política monetaria más restrictiva aquí y en el extranjero, y también los efectos probables de unas condiciones crediticias más restrictivas”.
También dijo que ve la inflación bajando a alrededor del 3,25% este año. El indicador preferido de la Reserva Federal para medir la presión sobre los precios, el índice de precios de los gastos de consumo personal, subió un 5% en los 12 meses transcurridos hasta febrero.
Aun así, Williams reconoció que la incertidumbre en torno a las perspectivas era elevada.
“Hay muchos factores que me dicen que la economía va mejor y que incluso podría sorprender al alza”, dijo. “Y luego, obviamente, hay preocupación por los riesgos en torno al endurecimiento de las condiciones crediticias”.
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