Bloomberg — Según un informe del Instituto de Investigación ADP en colaboración con el Laboratorio de Economía Digital de Stanford, las empresas estadounidenses añadieron menos puestos de trabajo de lo esperado en marzo, y el crecimiento salarial se ha ralentizado, lo que indica que la demanda de mano de obra podría estar empezando a enfriarse.
En concreto, las nóminas privadas aumentaron en 145.000 el mes pasado, tras una cifra revisada al alza de 261.000 en febrero. Esta cifra se situó por debajo de todas las estimaciones de una encuesta de Bloomberg entre economistas.
Si bien la contratación aumentó sobre todo en los sectores de ocio y hostelería, comercio, transporte y servicios públicos, y construcción, algunos sectores, como la industria manufacturera, las actividades financieras y los servicios profesionales y empresariales, experimentaron un descenso de las nóminas. El sur del país fue la única región que perdió puestos de trabajo, junto con algunas empresas medianas.
El informe sugiere que las de subidas de tasas de interés de la Reserva Federal, que dura ya un año, podría estar empezando a tener un impacto negativo en el mercado laboral. Además, los despidos que inicialmente afectaron a las grandes empresas tecnológicas están empezando a extenderse a otros sectores.
Las recientes turbulencias en el sector bancario también podrían afectar a la contratación si el endurecimiento de las condiciones crediticias lleva a las empresas a detener sus planes de expansión. Las empresas más pequeñas ya están teniendo problemas para competir por el talento en medio de las presiones salariales y el aumento de los costos de los préstamos.
“Nuestros datos sobre las nóminas de marzo son una de las varias señales de que la economía se está ralentizando”, declaró en un comunicado Nela Richardson, economista jefe de ADP. “Los empleadores se están retirando de un año de fuertes contrataciones y el crecimiento salarial, después de una meseta de tres meses, está disminuyendo”.
Los trabajadores que permanecieron en sus puestos de trabajo experimentaron un aumento salarial del 6,9% en marzo respecto a hace un año, el más bajo en más de un año, según los datos de ADP, que analiza las nóminas de más de 25 millones de empleados estadounidenses. Para los que cambiaron de trabajo, el aumento medio del salario anual se redujo al 14,2%, también el más bajo desde enero de 2022.
Hay otros indicios de que la demanda de trabajadores está disminuyendo, pero sigue siendo elevada. Las ofertas de empleo cayeron en febrero al nivel más bajo desde mayo de 2021, según datos publicados el martes.
Se prevé que los datos del Gobierno publicados el viernes muestren que los empresarios crearon alrededor de un cuarto de millón de puestos de trabajo el mes pasado y que la tasa de desempleo se mantuvo en un nivel históricamente bajo.
Lea más en Bloomberg.com
