Tras caída de Justo & Bueno, ¿cómo les va a tiendas de descuento y qué tanto les compran?

Con la salida de Justo y Bueno se perdió terreno importante, pero D1, ARA e Isímo están aprovechando estos vacíos para desplegar su estrategia en medio de una fuerte inflación en Colombia

Por

Bogotá — En tiempos en los que la inflación presiona cada vez más la economía de los hogares colombianos, el negocio de las tiendas de descuento duro ha encontrado una vía para reestructurarse, a pesar de que la gran deuda de la rentabilidad en este modelo.

El negocio de las tiendas de descuento se reacomoda luego de la estrepitosa quiebra de Justo & Bueno con la llegada de nuevos jugadores como Isímo, de la familia de millonarios barranquilleros Char, y los movimientos que hacen otros como ARA, de la compañía portuguesa Jerónimo Martins, que espera invertir 1.000 millones de euros en los próximos cinco años en el país. Pero, ¿qué perspectiva hay para el negocio?

El 2022 dejó la caída de Justo & Bueno, uno de los principales jugadores del negocio del formato de descuento duro en el país, en donde la competencia no solo se mantiene sino que se que se va a fortalecer con la entrada de los Char al negocio.

“Se viene un crecimiento acelerado del formato hard discount para este año, después de 18 meses de disminución en la participación, a raíz de la salida de Justo & Bueno”, dijo.

En entrevista con Bloomberg Línea, el gerente de investigaciones económicas del sector Comercio en Bancolombia, Nicolás Pineda Bernal, Explicó que dos elementos fundamentales estarán impulsando la apertura de nuevas tiendas: el primero es la entrada del nuevo jugador Ísimo con un plan de expansión bastante ambicioso.

El segundo es el anuncio de hace unas semanas por parte de Jerónimo Martins para invertir cerca de $1.000 millones de euros en ARA para los próximos 5 años.

De acuerdo a sus estimaciones, en 2023 el número de tiendas de hard discount podría crecer entre un 20% y 30%.

Según cifras de ese departamento de análisis, durante el 2021 la participación de los hard discounters era del 33%; sin embargo, con la salida de Justo y Bueno se perdió terreno importante.

“Según nuestros análisis creemos que bajó al 24%”, explicó Pineda Bernal a Bloomberg Línea.

This browser does not support the video element.

De acuerdo a cifras entregadas a Bloomberg Línea por la firma Kantar, la participación del segmento de los discounter al cierre del cuarto trimestre de 2022 fue del 21%.

“En comparación a los otros trimestres del año se mantuvo relativamente estable. Además logran superar ya la participación de los minimercados y llegan a tener 98 puntos de penetración para el total del año”, dijeron a una consulta de este medio.

¿Qué esperar en el 2023?

El analista manifestó que ante un escenario que continuará a lo largo del año con altos niveles de inflación, tanto al consumidor, como al productor, “los retos para el formato hard discount están focalizados en sostener los márgenes de rentabilidad que, de entrada, por su modelo de negocio son más estrechos comparados con los formatos tradicionales de retail”.

“Lo anterior se logra a partir de un manejo eficiente de los inventarios, de los costos y de la logística en general”, añadió.

A pesar de esto ve oportunidades ante un contexto en el cual los consumidores han perdido capacidad adquisitiva, producto del incremento de los precios (en especial de los alimentos) y un mayor índice de endeudamiento.

“Los hogares colombianos cada vez buscan productos con una alta relación calidad/precio, lo cual se alinea con la propuesta de valor de los hard discounters”, dice.

¿Por qué los grandes grupos del retail le pueden estar apostando a este modelo?

Para Pineda los grandes grupos lo ven como una oportunidad en la medida en la que pueden agregar capilaridad y establecer presencia en zonas donde antes no llegaban.

Además, señala que pueden apalancarse del conocimiento, experiencia e infraestructura logística para operar de manera eficiente las tiendas.

Pero como lo mencionó, “la gran deuda que aún no se logra saldar es la rentabilidad, pues si bien algunas marcas ya reportan utilidades positivas, los indicadores de retorno al patrimonio, por ejemplo, continúan siendo bajos. En otras palabras, el capex que se invierte, aún presenta retornos relativamente bajos, en especial durante esta época donde el costo de oportunidad (tasas de interés) es bastante alto”.

Síguenos en las redes sociales de Bloomberg Línea Colombia: Twitter, Facebook e Instagram