Bogotá — En una esquina están los empresarios, que argumentan que la Reforma laboral radicada por el Gobierno Petro generará efectos nocivos para el mercado laboral, y en la otra esquina los sindicatos, que señalan que este proyecto garantizará los derechos laborales de los colombianos y combatirá la precarización.
Y es que a pesar de los intentos del Ejecutivo, en cabeza de la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, por lograr consensos en la mesa tripartita (centrales sindicales, gremios de producción y Gobierno), lo cierto es que quedaron más desacuerdos que acuerdos. Estos son los puntos en discordia que enfrentan a ambas partes y que calentarán el debate en el Congreso de la República:
Los dardos de los empresarios al proyecto
-Aumento en los costos de contratación: según Fenalco (Federación Nacional de Comerciantes), los costos que deben asumir los comerciantes para contratar personal se incrementarían entre 30% y 35%. “Es importante resaltar que por cada $100 que vende un pequeño comerciante, su ganancia neta es entre $2 y $4 únicamente, por lo que no todos serán capaces de absorber estos costos sin consecuencias”.
Punto en el que coincide con Amcham Colombia, la Cámara de Comercio Colombo Americana, que expresó que “el articulado propuesto por el Gobierno Nacional representa un desbalance en la relación empresa-trabajador, aumentando considerablemente los costos de contratación. Lo que conducirá a las empresas a revisar sus necesidades laborales para ajustarse a la normatividad propuesta, lo que iría en detrimento de la estabilidad laboral”.
-Cambios en la operación de los comercios: para hacerle frente a la Reforma, dice Fenalco, habría que tomar medidas como reajustes de precios, sustitución de mano de obra por automatización de procesos y tecnología, ajustes en los horarios de atención, cierre de puntos de venta y la no contratación de nuevo personal.
-Golpea las actividades nocturnas de servicios y comercio: Amcham Colombia sostuvo que hay sectores económicos con alta incidencia en la generación de empleo como la seguridad privada, el comercio, la gastronomía, el turismo y el entretenimiento, que por su naturaleza prestan servicio en horario nocturno o fines de semana, y los cuales tendrían que minimizar su capacidad laboral de aprobarse el cambio en la definición de la jornada de trabajo.
“La reducción horaria de la jornada diurna y el incremento en los recargos por trabajo dominicales y festivos generará un fuerte impacto en los valores de hora de trabajo y será inevitable repensar las jornadas y turnos de trabajo con los que las empresas gestionan sus actividades”, enfatizó la Cámara.
Y Fenalco añadió que la Reforma destruye todas las estrategias de ciudades productivas 24 horas, como es el caso de Bogotá, y no considera los retos y desafíos actuales en materia de logística y transporte de mercancías. “El 85% de las empresas del comercio minorista formal pertenece a categorías que tienen horarios extendidos. Muchos de ellos funcionan 24/7″.
-Desincentiva la contratación: frente a la contratación a término indefinido como regla general, Jaime Cabal, presidente de Fenalco, refirió que “según la encuesta anual de comercio, el 53% de la fuerza laboral del comercio son mujeres y el 34% son jóvenes menores de 28 años. Contrario a lo que se propone en el articulado, los jóvenes hoy demandan nuevos formatos de contratación que les permitan independencia y libertad en el manejo de su tiempo”.
Por lo que este proyecto, señaló, podría elevar el desempleo entre 4,2 y 5,7 puntos. Lo que significa que el número de desempleados pasaría de 3,4 millones de personas que registra el Dane a alrededor de 4 millones en el mediano plazo.
Y en cuanto a los contratos de aprendizaje, Amcham Colombia argumentó que el cambio en su naturaleza, convirtiéndolo en un contrato a término fijo más el cambio en la monetización, terminará siendo oneroso para los empleadores especialmente al encontrarse, hoy en día, con la falta de aprendices y pertinencia del conocimiento de estos para las necesidades del tejido empresarial.
-Se necesitan límites y proporcionalidad en la indemnización: María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, también alertó sobre los cambios en los procesos para la terminación de contratos de trabajo y procesos de indemnización cuando haya lugar, “para que tenga límites y proporcionalidad al tiempo trabajado el pago de la respectiva indemnización y no un valor único sin contemplar la antigüedad del trabajador”.
La defensa de los sindicatos
Diógenes Orjuela, director del Departamento de Relaciones con Sectores Sociales de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia (CUT), sostuvo que “es positivo priorizar el contrato a término indefinido e incluir límites a diferentes formas de contratación e intermediación que precarizan el empleo. Han sido usadas para fisurar la estabilidad, ocultar el verdadero empleador y así negar derechos laborales y sindicales”.
Manifestó además que medidas como recuperar la jornada nocturna desde las 6:00pm, recuperar el pago para dominicales y festivos del 100% y una nueva tabla de indemnización para el despido sin justa causa, son necesarias porque hay que “recuperar derechos arrebatados por las reformas regresivas de los expresidentes César Gaviria y Álvaro Uribe en acatamiento del recetario neoliberal. El despojo de derechos no aumentó el empleo, bajó la participación de los salarios en el PIB, no mejoró la productividad ni evitó los estragos de los TLC”.
Y agregó que las entidades y empresas del Estado, multinacionales y grandes organizaciones cuentan con mejores condiciones para devolver derechos arrebatados a los trabajadores, por lo que deben ser ejemplo y retribuir esa deuda histórica en beneficio del poder adquisitivo y del mercado interno.
“El Gobierno debe conversar con sectores agropecuarios y mipymes sobre particularidades y convenir mecanismos que les permitan concurrir en conjunto sobre esos costos laborales. Lo que genera empleo formal es: protección del mercado interno y el estímulo al aparato productivo”, sostuvo.
Por su parte, Diana Gómez, secretaria general de la Confederación de Trabajadores de Colombia, aseguró que “un país que remunera con justicia a sus trabajadores y que respeta el contrato de trabajo, es un país que puede también tener estabilidad, porque la estabilidad laboral es lo que le permite a los trabajadores y trabajadoras poder construir un futuro con sus familias. Hacemos un llamado para que el Congreso escuche estas propuestas y las ratifique”.
Y Percy Oyola, presidente de la CGT (Confederación General del Trabajo), expuso que “esta propuesta de Reforma laboral no solamente recoge los principios contenidos en el artículo 53 de la Constitución sino los principios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y de hacer posible que el Congreso de la República haga realidad esta Ley indudablemente tendremos dignidad y trabajo decente”.
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