Bloomberg — El precio de una cesta de productos ingleses para el desayuno se disparó por encima de las 35 libras (43 dólares), ya que la escasez de verduras en los supermercados provocó un sorprendente aumento de la inflación en el Reino Unido.
Los precios del tomate subieron un 6,4% en febrero respecto al mes anterior, la segunda mayor subida en el último Índice Bloomberg del Desayuno, por detrás del pan. Una crisis de abastecimiento llevó a supermercados como Tesco Plc y J Sainsbury Plc a restringir la venta de ciertos productos a tres por persona el mes pasado, mientras las imágenes en las redes sociales mostraban estanterías vacías en todo el país.
La Oficina Nacional de Estadística informó el miércoles de que la escasez de ensaladas contribuyó a un sorprendente aumento de la tasa general de inflación, que subió al 10,4%. Los economistas esperaban que la tasa cayera por debajo del 10%.
La crisis comenzó con las malas cosechas en el sur de Europa y África debido al frío. Los elevados costes de la electricidad también limitaron el suministro, ya que resultaba demasiado caro cultivar productos fuera de temporada en los invernaderos británicos, que consumen mucha energía.
En general, el coste medio de los productos para preparar una fritura tradicional aumentó en febrero más de un 22% con respecto al año anterior. Es el segundo mes consecutivo en que el Índice del Desayuno aumenta más de un 20%.
El índice se basa en los datos de la ONS sobre el precio de las salchichas, el bacon, los huevos, el pan, la mantequilla, los tomates, los champiñones, la leche, el té y el café.
Utilizando los tamaños de los productos facilitados por la ONS, el coste total de los ingredientes del desayuno inglés aumentó en casi 6 libras respecto al año anterior, hasta situarse en 35,10 libras. La leche sigue registrando la subida más espectacular, con un aumento del 43% respecto al año anterior. El pan subió un 33% respecto al año anterior y los huevos un 33%, mientras que todos los ingredientes aumentaron de precio.
“Los hogares siguieron sufriendo la presión de la inflación, impulsada por los precios de los alimentos y las facturas domésticas”, declaró Helen Dickinson, directora ejecutiva del Consorcio Británico de Minoristas. Dijo que una libra más débil ha “encarecido la importación de productos como las verduras de Europa”.
La ONS señaló que, en general, los precios en los supermercados británicos subieron en febrero a su ritmo más alto desde al menos 2005. Los compradores recurren a las cadenas de descuento Aldi y Lidl en medio de la peor inflación del país en una generación. Otros supermercados, como WM Morrison Supermarkets Ltd., están ampliando las listas de artículos con descuentos temporales en un intento de atraer a los clientes.
--Con la colaboración de Katie Linsell, Telma Marotto y Leonid Bershidsky.
Lee más en Bloomberg.com
