Inversión extranjera directa en Chile alcanza su máximo nivel desde 2014

El Banco Central de Chile revisó los números y observó que el incremento en 2022 respecto del año anterior fue del 31%

PUBLICIDAD
La minería es el sector fundamental para la economía chilena. / Fotógrafo: Cristobal Olivares/Bloomberg
21 de marzo, 2023 | 10:04 AM

Bloomberg Línea — La inversión extranjera directa (IED) que llegó a Chile en 2022 registró un aumento anual del 31%, para llegar a US$20.865 millones. Según destacó el Gobierno de Chile, esta cifra es un 50% superior al promedio del último quinquenio y un 46% superior al promedio de la serie histórica 2003-2022.

El número se conoció luego de que el Banco Central de Chile (BCCh) diera a conocer las cifras de actividad y balanza de pagos correspondientes al cuarto trimestre de 2022, corrigiendo al alza la cifra de inversión extranjera.

De esta inversión extranjera, US$8.851 millones corresponden a nuevos aportes de capital, mientras que US$10.777 millones corresponden a reinversión de utilidades. Por su parte, los instrumentos de deuda alcanzaron un total de US$1.237 millones.

Fuente: Gobierno de Chile

La visión del Gobierno

La directora de InvestChile, Karla Flores, valoró positivamente el flujo récord de IED recibido el año pasado y profundizó en su aporte a la recuperación económica del país. “Las cifras no solo confirman la confianza que las compañías extranjeras tienen en Chile, sino que lo más importante es que estos números se traducen en más empleos, innovación y capacitación. En resumen, se generan más oportunidades para desarrollar el talento y mejorar la calidad de vida de los chilenos y chilenas”, señaló.

Además, Flores destacó el desafío que implica continuar trabajando en la atracción de inversiones en un contexto económico global complejo, donde se espera que el 2023 sea un año especialmente difícil para la inversión. En este sentido, InvestChile se enfocará en promover oportunidades en sectores de futuro y de alto valor para el país, como las energías limpias, la infraestructura tecnológica, la innovación agroalimentaria, la economía circular y el hidrógeno verde, entre otros.