16 millones de personas no acceden a energía eléctrica en Latinoamérica y Caribe

A raíz de ello, expertos reunidos en Cepal pidieron acelerar la transición energética. El organismo planteó cinco pilares básicos para lograrlo

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Expertos en energía se reunieron en la sede de Santiago de Chile de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) para debatir acerca de la situación energética de la región y aseguraron que es necesario acelerar la transición energética.

“América Latina y el Caribe necesita avanzar con urgencia hacia la transición energética, con mayor producción de energías renovables, universalizando el acceso a la energía y aumentando la eficiencia energética entre otras medidas”, señalaron el jueves autoridades y expertos, según resumió la comunicación oficial de Cepal. El debate se dio en el marco del “Taller de Expertos de Alto Nivel para el Informe Especial sobre América Latina del World Energy Outlook 2023 de la Agencia Internacional de Energía (IEA, por su nomber en inglés).

Además, desde el organismo perteneciente a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recordaron que en Latinoamérica y el Caribe hay unas 16 millones de personas que no pueden acceder a energía eléctrica.

En este marco, Cepal planteó cinco pilares que se deben cumplir en la región para acelerar la mencionada transición hacia energías renovables.

Los 5 pilares que propone Cepal para la transición energética

Cepal suele propiner cinco pilares de acción simultánea para llevar adelante la mencionada transición:

  • Incrementar la energía renovable en la matriz energética.
  • Universalizar el acceso a la electricidad basada en renovables y disminuir la pobreza energética.
  • Incrementar la eficiencia energética en todos los sectores.
  • Fortalecer la complementariedad, integración e interconexión regional.
  • Aumentar la seguridad y resiliencia energética ante choques externos.

16 millones de personas sin acceso a energía eléctrica

El secretario ejecutivo de Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs, sostuvo: “La situación actual de crisis en cascada y sus efectos para América Latina, incluyendo el aumento de la pobreza, una nueva década perdida en crecimiento económico, alta inflación y restricciones fiscales, han puesto en evidencia la fragilidad y vulnerabilidad de los sistemas energéticos de los países, con impactos negativos en la seguridad, equidad y sostenibilidad energética”.

Según Salazar-Xirinachs, estas crisis “han afectado de manera especial a los hogares de los quintiles más vulnerables, empeorando la situación de pobreza e inequidad”.

El funcionario recordó que pese a los avances en cobertura eléctrica de la región (que alcanza al 97% de la población), todavía existen 16 millones de personas sin acceso a este vital servicio y 77 millones no tienen acceso a sistemas de cocción limpia. A eso se suma la alta fragilidad de los países que dependen de las importaciones de combustibles fósiles (gas y petróleo), lo que devela también su baja diversificación y renovabilidad en su matriz energética.

“Todo esto nos aleja del cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 (’Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos’), cuyo avance es insuficiente o muy lento para alcanzar las metas de proporción de renovabilidad y de eficiencia energética en la región como un todo”, indicó.

Crecimiento de las energías limpias y energías renovables en la región

Un informe reciente de Statista Research Department reseña: “Debido a su vasta geografía y sus abundantes recursos naturales, América Latina tiene el potencial para convertirse en una de las piedras angulares del sector. No en vano, la capacidad de energía renovable en la región superó los 290 gigavatios en 2021, un valor que supone un crecimiento de más del 67% con respecto a diez años atrás”.