Buenos Aires — Argentina se convirtió en uno de los tres países del mundo con más inflación, al menos entre aquellos en los que hay registros verificables, y una de las grandes preguntas cómo fue que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) superó el 100% y, más importante aún, qué tiene que pasar para que el país pueda desandar este camino. Argentina ya lleva 15 años con la inflación por encima de los dos dígitos y ahora superó la barrera de los tres.
Déficit fiscal, inercia, indexación continua y devaluaciones son algunas de las razones que esgrimen los expertos para explicar por qué Argentina tiene entre 10 y 20 veces más inflación que sus vecinos.
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El déficit fiscal
“El proceso inflacionario viene de muchos años atrás y se debe a que no se corrigió la causa de fondo: el financiamiento del déficit con emisión”, sostuvo Gabriel Caamaño Gómez, director de la consultora Ledesma.
En línea con esta mirada, el economista de Empiria Juan Ignacio Paolicchi indicó la inflación tiene “una raíz muy asociada a lo que es el déficit fiscal crónico que tiene Argentina”.
A partir de esta definición, Paolicchi reseñó que para financiar “el agujero fiscal”, Argentina tiene que “tomar deuda, emitir, vaciar alguna caja del Estado (como pasó con las AFJP o las privatizaciones)”. Según su mirada, “el país siempre recurre a distintos recursos de prestado para financiar el ese rojo fiscal”.
“El exministro de Economía Martín Guzmán decía que no era grave el endeudamiento en pesos, precisamente porque era en pesos, y eso terminó generando una corrida que llevó al Banco Central a imprimir 3 puntos del Producto Interno Bruto para evitar que la curva en pesos entre en default. Al final del día, todo concluye en que el déficit fiscal es la principal causa”.
En relación a este aspecto, el director de la consultora Analytica, Claudio Caprarulo consideró que el principal problema no es tanto el déficit fiscal sino cuánto se puede financiar del déficit. “Las potencias pueden financiar el déficit que necesiten, nosotros no podemos financiar casi 1,9% del Producto como va a pasar este año”.
El factor cambiario
Caprarulo sostuvo que hay una “multiplicidad de factores” que empujan la inflación en Argentina, pero destacó: “El primer impulsor de la inflación es el factor cambiario, ya que el dólar define muchos de los costos de producir en la Argentina, principalmente en bienes importados pero actualmente también otros que no. Los saltos devaluatorios en la gestión de Cambiemos y la brecha cambiaria en la del Frente de Todos explican parte de la aceleración en la inflación”.
En relación a la incidencia del dólar en términos de inflación, Paolicchi consideró que el tipo de cambio es un “método de propagación”.
El ejecutivo de Empiria consideró que “una corrección de precios relativos del tipo de cambio o de las tarifas acelera la inflación, al igual que las negociaciones de salarios”. Pero remarcó que, a su entender, “la raíz es fiscal”.
Inercia inflacionaria
Luego de una década y media con inflación superior a los dos dígitos, los argentinos tienen chipeada en su memoria la suba de precios. “La inflación es un proceso que ganó mucha inercia. Los agentes lo tienen muy incorporado en su toma decisiones. Tienen una estrategia de cobertura internalizada”, consignó Caamaño Gómez.
Además, el director de Ledesma detalló que “cada nuevo shock te hace subir un escalón más, pero nunca baja”.
En términos de shocks, Caprarulo mencionó: “A partir de la salida de la pandemia y la guerra con Ucrania, el aumento de precios a nivel internacional también fogoneó la suba a nivel local, que montada sobre una economía y con tasas elevadas se amplificó”.
¿Cómo estabilizar?
Bloomberg Línea consultó a los tres analistas antes mencionados qué medidas podría tomar el país para poder desandar el camino de la inflación. Y estas fueron sus respuestas:
Gabriel Caamaño Gómez:
- “Va a ser muy costoso bajar rápido la inflación”.
- “Una estrategia de desinflación sustentable lo que tiene que tener como primer pilar es equilibrio fiscal. Si lográs equilibrio fiscal, eliminás la principal fuente de emisión y desactivás expectativas de los agentes respecto de emisión futura. Y eso ayuda a que la demanda de pesos deje de caer”.
- “La política monetaria es importante, pero si lográs un ancla fiscal sostenible en el tiempo la política monetaria es más fácil”.
- “No es una utopía bajar la inflación, todos en la región lo lograron sin hacer nada raro”.
Claudio Caprarulo
- “La inercia inflacionaria es un factor relevante, por eso es necesario un plan de estabilización que, entre otras cosas, coordine los precios de algunos rubros claves y también salarios”
- “Para poder bajar la inflación en forma sostenida y sostenible, o sea, sin apelar a fantasías como la Convertibilidad, es necesario que haya consensos entre las principales fuerzas políticas”.
- “Se necesita una política fiscal y monetaria, que dé señales claras de encarar el problema de la inflación por donde corresponde: desde la macro. Eso implica objetivos y una coordinación clara para recuperar la moneda nacional”.
- “Cualquier programa antiinflacionario necesita un Banco Central con dólares. Esa es la condición necesaria, pero no suficiente”.
Juan Ignacio Paolicchi
- “Argentina necesita en un programa de estabilización que arranque corrigiendo precios relativos y que con esa corrección sentar las bases para una macroeconómica más sólida con reformas estructurales y un equilibrio fiscal para crecer a tasas razonables y sostenibles. Con eso el país podría entrar en un proceso de desinflación sostenible en el tiempo”.