Ciudad de México — El CEO de la empresa estatal Petróleos Mexicanos, conocida como Pemex, busca opciones más baratas de financiamiento que el de los mercados de deuda internacionales.
Octavio Romero Oropeza, encargado de dirigir a la petrolera mexicana más endeudada del mundo, dijo en entrevista con la agencia informativa Reuters que la compañía ha sido “castigada” por agencias de riesgo crediticio a pesar de las mejoras medibles en sus operaciones.
“Sí, vamos a tratar de encontrar el mejor y más barato mecanismo”, declaró el ingeniero a Reuters.
La declaración aparece después de que Pemex regresó a los mercados financieros con una emisión de US$2.000 millones para cubrir vencimientos con una tasa de 10,73%, una de las más altas en deuda a 10 años, parcialmente por las condiciones de tasas de interés altas en los mercados internacionales.
Pemex, con deudas por casi US$108.000 millones, debe pagar US$8.200 millones este año en vencimientos y US$9.000 millones más en 2024 en bonos y préstamos bancarios de largo plazo.
Romero Oropeza espera no pedir más dinero al Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero tampoco lo descartó.
El directivo dijo que las agencias de calificación crediticia como Fitch Ratings y Moody’s Investors Service ignoran el progreso de la compañía en aumentar la producción y fueron las primeras en degradar a bono basura desde el grado de inversión la nota crediticia de Pemex, lo que significa que el financiamiento será más costoso para la empresa mexicana.
Pemex obtuvo ganancias por casi US$1.200 millones en 2022, pero lejos de los beneficio registrados por sus pares Petrobras, Shell o Exxon que rebasaron los US$30.000 millones cada una durante el año pasado.
El gerente asistente de financiamiento e inversiones de Pemex, José Alberto Jiménez, dijo en una llamada con analistas que Pemex espera refinanciar más deuda y dejó como última opción pedir ayuda al Gobierno mexicano.
Gran parte de los ingresos son devorados por altos costos como la compra de petrolíferos para reventa, costos financieros, impuestos y derechos.
El CEO de Pemex prevé que la compañía obtenga ganancias este 2023 con un precio del petróleo mexicano en orden de US$70 dólares por barril.
“(Una mayor extracción) nos permitirá cómodamente alcanzar la demanda de petróleo crudo y combustibles”, concluyó.