Bloomberg — Canadá solicitó consultas formales con México en relación a las restricciones a las importaciones agrícolas genéticamente modificadas en virtud de su acuerdo de libre comercio, luego de que Estados Unidos presentara una solicitud separada a principios de esta semana.
El Gobierno canadiense solicitó las conversaciones el martes 7 de marzo, según personas familiarizadas con el asunto, que pidieron no ser identificadas por no tener permiso para hablar públicamente.
El Ministerio de Comercio de Canadá no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.
La medida se produjo un día después de que la Administración Biden solicitó consultas sobre productos agrícolas biotecnológicos, incluido el maíz, bajo el acuerdo comercial entre EE.UU., México y Canadá.
Estas son un requisito previo para las conversaciones formales de resolución de disputas, como las que los países ya han tenido sobre automóviles y energía. Se pueden solicitar conversaciones sobre disputas si las discusiones técnicas no se llevan a cabo o no conducen a una resolución.
El Gobierno mexicano ha tomado medidas para limitar las importaciones y el uso de maíz transgénico, diciendo que podría representar un peligro para la salud de los ciudadanos del país. EE.UU. tomó la iniciativa, argumentando que las preocupaciones de México no tienen fundamento científico.
Canadá no es un importante exportador de maíz y no ha enviado maíz a México desde agosto, según datos de la Comisión Canadiense de Granos, mientras que EE.UU. considera al país latinoamericano como su segundo mercado más grande para este cultivo.
Lo que al país le preocupa, en general, es que México imponga prohibiciones arbitrarias a la agricultura producida con biotecnología, según personas familiarizadas con el asunto.
Canadá es el principal productor y exportador mundial de canola, un cultivo genéticamente modificado que se usa en todo, desde aceite para cocinar hasta para aderezar ensaladas, con México como uno de los principales compradores.
Canadá también se dice preocupado por la falta de respeto de México por el T-MEC, dijeron las personas. La idea es que si México ignora las reglas comerciales para los productores de maíz, podría hacer lo mismo para una industria como la minera, en la que Canadá tiene mucho más en juego, o su tratamiento de la inversión y el comercio en general.
El hecho de que Canadá haya presentado su propia solicitud de conversaciones simultáneamente a la de EE.UU. sigue la misma línea de actuación que en el tema de la energía, donde Canadá ya había presentado anteriormente una solicitud separada de la de EE.UU. por la política nacionalista de México que afectaba a la producción de electricidad.
En respuesta a la solicitud del lunes 6 de marzo, de la representante comercial de EE.UU. la Secretaría de Economía de México dijo que “demostrará con datos y pruebas que no ha habido un efecto en el comercio” y que ha actuado de conformidad con el T-MEC. El ministerio también dijo que no ve EE.UU. como “contenciosa”, sino como un paso preliminar para encontrar “una solución de manera cooperativa”.
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