Bogotá — La visa de inversionista es una de las rutas más afectivas para lograr migrar a EE.UU.; no obstante, son comunes los errores que se realizan en el proceso para obtenerla la denominada E-2 o la EB-5. ¿Qué recomendaciones hay que tomar?
Países latinoamericanos como Colombia han experimentado un importante aumento en las cifras de emigración, en medio de los desafíos económicas que enfrente la economía de la región.
De acuerdo a cifras del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac), un total de 547.000 colombianos emigraron del país el año pasado, rompiendo los registros históricos de finales del siglo XX y comienzos de este.
El resultado obtenido en el 2022 “fue 2,7 veces el promedio de nacionales que emigraron cada año desde 2012 (algo menos de 200.000 colombianos por año)”.
El director ejecutivo de la firma española de movilidad internacional Orience, Oriol Molas, explica que la forma legal de iniciar un proyecto de vida fuera de Latinoamérica “puede ser obtener una visa de residencia o una segunda ciudadanía-pasaporte por inversión, modalidad denominada golden visa”.
“También puede acceder a una nueva modalidad denominada visa de Nómada Digital, entre muchas otras. Lo que tienen en común todas estas alternativas es que requieren de un papeleo que puede resultar engorroso y, al final, no exitoso, si no se hace de la forma correcta”, explica.
En el caso de EE.UU. los inversionistas pueden optar por un tipo de visa E-2 (permite vivir de manera indefinida en el país, pero requiere ser renovada) o una EB-5 (otorga el derecho de residencia).
“Si bien cada persona va a precisar cosas distintas, hay una clave que se aplica a todos: por favor asesórense”, dice a Bloomberg Línea Abril Manali, directora de Operaciones en la empresa especializada en asuntos de migración Interlink.
Menciona el caso de inversionistas que cometen errores al gastar US$500.000 en la compra de un inmueble pensando que así pueden aplicar a la visa de inversión, cuando en realidad pueden hacerlo simplemente con la visa de turista B1/B2.
“Hubo varias personas que, para no pagar consultas de asesoramiento de negocios, me comentaron que compraron los ‘fondos de comercio’ por el Marketplace de Facebook. Eso no es serio, por supuesto que va a salir mal”, dice.
En este sentido, recomienda no comenzar una inversión únicamente por haber escuchado que “al primo de tal le fue bien con esto” o “el hijo de fulano está haciendo mucho dinero con este negocio”.
Se refiere al caso de colombianos que manifestaron que el abogado les había dejado de responder por meses y lo habían contratado porque era reconocido.
Por eso, se advierte que es importante pedir referencias a esos profesionales y sobre todo hablar con otros clientes antiguos que tuvieron.
Abril Manali explica que en este tipo de inversiones los fondos deben estar declarados porque se rastrea el origen de los mismos, por lo que se recomienda que las personas se vayan capitalizando en dólares ante la depreciación que afrontan varios mercados en Latinoamérica y que guarden todos los comprobantes de ese dinero.
Según cifras entregadas a Bloomberg Línea por la ejecutiva, la inversión promedio que realizan los colombianos que aplican a la E-2 se ubica entre los US$120.000 y hasta los US$400.000.
Destacan destinos como la Florida, siendo los preferidos Tampa, Orlando, Miami, San Petersburgo y Weston, debido a la facilidad en las conexiones aéreas cercanas para cuando quieran volver a Colombia y el clima cálido, según Manali.
También se ha reflejado esta dinámica de migración en Texas, particularmente en San Antonio, Austin, Houston y Dallas debido a los beneficios fiscales que tiene el estado (porque no hay impuesto estatal) y que el costo de vida es relativamente más bajo que en otros lugares de EEUU.
¿Qué caminos hay para obtener la residencia en EE.UU. y qué pasos deberían seguir los colombianos interesados?
La ejecutiva indica que una alternativa es pasar de una visa E-2 a una EB-5 aumentando el monto de inversión US$1 millón una vez la empresa esté en capacidad de hacerlo.
Un aspecto importante, es que si el dinero fue generado en EE.UU. los empresarios tienen que estar al día con la contabilidad y el pago de impuestos.
También indica que se puede pasar de una E-2 a una EB-5 invirtiendo en un proyecto regional que esté aprobado por el gobierno de EEUU. “Acá los montos varían dependiendo de la administración de EE.UU., pero puede ir de US$500.000 a US$800.000″.
Y también existe la alternativa de pasar de una E-2 a una green card a través del patrocinio, que puede generarse a través de un empleador (el cual debe demostrar que buscó trabajadores nacionales de EE.UU. y no encontró el adecuado).
También puede ser “un familiar que ya tenga la green card o, si el familiar aún no la tiene, deberá poseer estudios avanzados y así conseguir su propio patrocinador, una vez logrado esto, este familiar puede patrocinarlo a usted”, recomienda.
Los gastos básicos a considerar en caso de migrar a EE.UU.:
· El dinero a invertir en el negocio: para acceder a la E-2 se recomienda una inversión de por lo menos US$120.000. Si se aplica a una visa L-1 el monto deberá subir hasta US$300.000 como mínimo.
· Los gatos burocráticos: todos los trámites van a requerir unos US$15.000 para cubrir un abogado de inmigración, el plan de negocios que se debe presentar al consulado, la creación de una LLC (sería como una S.A.S en Colombia), la asesoría de algún experto en materia de negocios, entre otros.
· La mantención de tu familia: fondos por entre 4 o 5 meses para los inversionistas en industrias de cash flow rápido y para los demás sectores calcular 12 meses.
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