Bloomberg — Japón registró la menor cantidad de nacimientos de su historia en 2022, profundizando un declive de 7 años que agrava los desafíos de una sociedad que envejece rápidamente.
En concreto, la cantidad de nacimientos cayó a menos de 800.000, un 5,1% menos que 2021 y la menor cantidad desde que empezó a llevar registros e 1899, según el ministerio de Salud de Japón. La cantidad de muertes subió casi 9% a 1,58 millones durante el mismo período.
La falta de nacimientos en el país asiático implica una menor fuerza de trabajo y de contribuyentes para sostener la tercera economía más grande del mundo en el futuro.
El creciente costo del cuidado de sus ciudadanos de edad avanzada, que representan una proporción de la población mayor que en cualquier otro país, está vaciando las arcas de la nación, contribuyendo a convertirla en el país más endeudado del mundo.
“Reconocemos que el descenso de la natalidad es una situación crítica”, declaró Yoshihiko Isozaki, subsecretario jefe del gabinete, en una reunión informativa celebrada el martes. “Entiendo que hay varios factores intrincadamente entrelazados que impiden a las personas hacer realidad sus esperanzas de matrimonio, nacimiento y crianza de los hijos”.
El gobierno ha estado intentando aumentar la población activa animando a más mujeres a trabajar y aceptando a algunos inmigrantes. El primer ministro Fumio Kishida ha hecho del apoyo a los niños y sus familias una prioridad. El gobierno expondrá sus políticas sobre la infancia y la crianza de los hijos y presentará un marco antes de junio para duplicar el presupuesto destinado a ellas, según Isozaki.
El gobierno asignó 4,8 billones de yenes (US$35.200 millones) del presupuesto fiscal de 2023 a una nueva agencia dedicada a los niños y sus familias, según informó el diario Nikkei en diciembre.
Los vecinos de Japón se enfrentan a problemas similares.
La población de China se redujo en 2022 por primera vez en seis décadas. Tenía 1.410 millones de habitantes a finales del año pasado, 850.000 menos que el año anterior, según los datos publicados por la Oficina Nacional de Estadística el mes pasado. Fue el primer descenso desde 1961, el último año de la Gran Hambruna bajo el antiguo líder Mao Zedong, y coincidió con la segunda tasa de crecimiento económico más baja desde la década de 1970.
La tasa de fecundidad de Corea del Sur, la más baja del mundo desde hace años, cayó a 0,78 hijos por mujer en 2022, según la oficina de estadística del país, lo que agravará los problemas económicos derivados del envejecimiento de la población. Con 0,81 en 2021, ya estaba en la cola de los más de 260 países analizados por el Banco Mundial.
--Con la colaboración de Isabel Reynolds y Takashi Hirokawa.
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