Bloomberg — La compañía petrolera brasileña Petrobras (PETR4), que está controlada por el estado, bajó debido a los temores cada vez mayores de que reducirá considerablemente sus dividendos y comenzará a subvencionar el combustible en tiempos del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Las autoridades modificarán la política sobre dividendos de la empresa y destinarán parte de los abultados dividendos con los que ha premiado a sus accionistas a realizar inversiones orientadas hacia la transición del sector energético, explicó una fuente conocedora del tema. También se destinará una parte del dinero a alcanzar el “fin social” de dicha empresa, señaló la fuente, que prefirió no revelar su nombre porque la información no era pública.
Por su parte, las acciones con voto de la petrolera bajaron hasta un 4%, el mayor descenso en casi un mes. Por su parte, las acciones preferentes, de mayor liquidez, retrocedieron al conocerse la noticia, de la que se hizo eco en primer lugar el sitio de Internet G1.
Previamente, las acciones ya habían experimentado un descenso como consecuencia de la rebaja de los precios de la gasolina y el diesel anunciada por la empresa. Menos de 24 horas después de que el ministro de Finanzas, Fernando Haddad, anunciara que solicitaría a la compañía que bajara los precios para hacer frente a una excepción impositiva sobre los carburantes que expiró este martes.
Petrobras recorta precios de diesel y gasolina en medio de conversaciones sobre impuestos a los combustibles
Las grandes petroleras de todo el mundo están llenas de efectivo después de que los precios del petróleo se dispararan el año pasado, lo que las puso bajo escrutinio en busca de ganancias extraordinarias en un momento en que los consumidores sufren la inflación. El Partido de los Trabajadores de Lula tiene un historial de subvenciones a la gasolina y el gasóleo por parte de Petrobras durante su mandato.
“Es su viejo libro de jugadas”, dijo Fernando Valle, analista de Bloomberg Intelligence. “Se remonta a principios de la década de 2010, cuando la política de precios de combustible de Petrobras la convirtió en la empresa más endeudada del mundo”.
Los dividendos récord que Petrobras ha estado pagando son el resultado de un gran cambio en los últimos seis años. Recortó el apalancamiento, impulsó la producción y redujo los gastos, dejando a Lula con lo que los analistas consideran una empresa bien administrada con un sólido balance.
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