Mexicanos marchan en contra de la reforma electoral de AMLO

Miles de manifestantes vestidos de rosa y blanco, los colores del Instituto Nacional Electoral, llenaron el Zócalo de la Ciudad de México

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Bloomberg — Mexicanos marcharon el domingo 26 de febrero contra la reforma al sistema electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Manifestantes a nivel nacional critican los cambios legislativos previos a las elecciones presidenciales de 2024.

Miles de manifestantes vestidos de rosa y blanco, los colores del Instituto Nacional Electoral, llenaron el Zócalo, la plaza central de la Ciudad de México, según imágenes difundidas por Milenio TV, que decían que la gente protestaba en más de 100 ciudades.

Los mexicanos en el extranjero también protestaron, incluso en Madrid. Los manifestantes portaban carteles con el mensaje “No toques mi voto”.

La reforma de López Obrador busca reducir el financiamiento al INE, como se conoce al organismo electoral, y recortar su plantilla.

El regulador y el tribunal electoral no son de confianza, ha dicho el presidente también conocido como AMLO.

El Senado aprobó el proyecto de ley electoral el 22 de febrero después de que el Gobierno no aprobara una reforma más amplia que requería cambiar la Constitución. La propuesta original incluía cambios en la forma en que se eligen las autoridades electorales.

“Aquí en este Zócalo hay esperanza”, dijo Beatriz Pages, organizadora de la protesta y exdiputada del PRI, en un discurso en la protesta de la Ciudad de México transmitido por Milenio TV.

Pages pidió a los manifestantes que se unieran a ella en “una larga, larga batalla por la democracia”.

La senadora Josefina Vázquez Mota y el diputado de la Cámara de Diputados Santiago Creel, ambos del opositor partido PAN, publicaron fotos de ellos mismos en la manifestación de la Ciudad de México en sus respectivas cuentas de Twitter.

La oposición, que denuncia la reforma como un intento de manipular las elecciones del próximo año, pedirá a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que anule la legislación, argumentando que requiere una mayoría de dos tercios en el Congreso para eludir la Constitución.

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