La fiscalía general de Perú dijo el martes que Estados Unidos había concedido la extradición del expresidente Alejandro Toledo para ser juzgado en Lima por acusaciones de corrupción.
Toledo, que vive en California, es buscado en Perú por presuntas negociaciones de sobornos con el conglomerado brasileño Odebrecht durante su presidencia entre 2001 y 2006. Las acusaciones son parte de una creciente red de sobornos que se conoció como Car Wash, que involucraba las operaciones de Odebrecht en gran parte de América Latina.
Toledo, economista de 76 años, fue el primer presidente electo tras la caída de Alberto Fujimori y presidió durante un período de crecimiento económico particularmente rápido. Ha negado las acusaciones de lavado de dinero y colusión.
Odebrecht ahora se conoce como OEC Engenharia & Construção.
Un juez estadounidense ya había autorizado la extradición de Toledo en septiembre de 2021, pero el fallo aún requería la aprobación del Departamento de Estado. La extradición culminaría un proceso de búsqueda de años de Toledo por parte de Perú, mientras él residía cerca del campus de la Universidad de Stanford. Toledo se graduó de dicha universidad y luego trabajó allí.
La oficina del fiscal general de Perú, que hizo el anuncio en Twitter, no dijo cuándo podría retornar Toledo a Perú. Toledo se encuentra entre una larga lista de expresidentes peruanos que han sido investigados o acusados por corrupción en los últimos años.
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