Ciudad de México — Fomento Económico Mexicano (FEMSA), un conglomerado minorista y embotellador, recibió una baja en su perspectiva crediticia de la calificadora de riesgo Fitch Ratings, tras analizar las posibles implicaciones de la revisión estratégica anunciada por la empresa.
Fitch Ratings bajó la perspectiva de estable a negativa porque considera que la venta de acciones de Heineken podría reducir la flexibilidad financiera de FEMSA (FEMSAUBD), de acuerdo con una nota.
“La compañía perderá cierta diversificación de negocios y verá reducidas las entradas de efectivo en moneda dura”, agregaron los analistas de Fitch Ratings en el comentario.
A pesar de este cambio, Fitch Ratings confirmó la calificación de su deuda de largo plazo en ‘A’, el sexto escalón dentro del grado de inversión.
La empresa mexicana dio a conocer el 15 de febrero un análisis estratégico de su negocios, para potenciar el valor, ante lo que considera como un desequilibrio entre el valor intrínseco de la empresa y el precio de sus acciones en el mercado.
FEMSA venderá su participación de 14,76% en la productora neerlandesa de cerveza Heineken, como parte de una revisión estratégica a su negocio. La primera etapa de esta desinversión, que considera 50% de sus acciones en la empresa, espera recibir US$3.500 millones.
La empresa, con sede en Monterrey, Nuevo León, analizará alternativas para Envoy Solutions, su negocio de soluciones de distribución en Estados Unidos.
Con estos movimientos, FEMSA dijo que busca reducir su deuda y mantener su grado de inversión, a la par de que impulsará los negocios que considera estratégicos.
Los recursos excedentes serán devueltos a los accionistas de FEMSA a lo largo del tiempo.
La baja en la perspectiva de Fitch también refleja la incertidumbre sobre si los ingresos de la desinversión se utilizarían para el crecimiento orgánico o inorgánico, o se devolverán a los accionistas.
Por su parte, S&P Global Ratings confirmó su calificación y perspectiva crediticia para FEMSA tras dar a conocer su plan estratégico.
“En nuestra opinión, estas desinversiones no cambiarían nuestras expectativas de que el apalancamiento de FEMSA tenderá por debajo de 2x, y que la compañía mantendrá un amplio espacio para la liquidez”, dijo la calificadora en una nota del 16 de febrero.
S&P mantuvo su calificación a escala global de BBB+, con una perspectiva estable, el octavo escalafón dentro del grado especulativo.
En octubre, S&P redujo la calificación a escala global de FEMSA de A- a BBB+, tras el cierre de la compra de la suiza Valora. A pesar de la baja en la calificación, la perspectiva de S&P para FEMSA cambió de negativa a estable.
