Bloomberg — La mexicana Femsa explora la adquisición de una cadena estadounidense de tiendas de conveniencia, a medida que cobra su participación en Heineken NV y busca salir de otros negocios.
El minorista de conveniencia podría expandir sus tiendas a áreas cercanas a la frontera entre EE.UU. y México, y también considerará la posibilidad de comprar una cadena regional en territorio estadounidense, dijo el viernes el director ejecutivo, Daniel Rodriguez, en una videoconferencia sobre la nueva estrategia de la compañía.
“Si encontramos una buena oportunidad que nos permita crear valor, definitivamente la analizaremos”, dijo.
La mayor operadora de cadenas de conveniencia de México está intentando ganarse a los accionistas con su nuevo plan de acción luego de que inversionistas castigaran el precio de sus acciones tras la compra de la suiza Valora el año pasado. Los inversores habían cuestionado una serie de adquisiciones en los últimos años que habían pesado sobre las acciones.
Femsa colocó una venta de acciones y bonos vinculados a acciones por valor de €3.700 millones el jueves de su participación de casi el 15% de las acciones de Heineken. La firma ha recortado su participación a aproximadamente el 8% y planea vender el resto en los próximos 36 meses, aunque podría avanzar aún más rápido de lo previsto originalmente después del éxito de la venta inicial, dijo el director financiero, Eugenio Garza, durante la conferencia.
La empresa está utilizando los ingresos de la primera venta para recomprar US$2.000 millones de sus bonos, según Garza.
Rodríguez dijo que la compañía se enfocaría en el crecimiento orgánico en América Latina de sus tres negocios principales: ventas minoristas, bebidas y digital. Femsa controla Coca-Cola Femsa SAB, la embotelladora de Coca-Cola más grande del mundo, y opera una billetera digital en México llamada Spin, así como una unidad de tecnología financiera dirigida a las tiendas familiares a las que abastece con bebidas.
La compañía también está buscando alternativas estratégicas para su empresa estadounidense Envoy y otras unidades no centrales. Rodríguez dijo que la compañía se movería más rápido que en el pasado para distribuir el exceso de efectivo que no necesita para el crecimiento a los accionistas a través de la recompra de acciones o dividendos extraordinarios.
El jueves, las acciones de Femsa subieron al máximo en más de dos años después de anunciar la venta de Heineken. La empresa había prometido emprender una revisión estratégica tras la decepcionante adquisición de Valora.
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