Bloomberg — Un alto responsable de la política monetaria colombiana dice que quiere ver señales de que el déficit fiscal se está reduciendo y que la inflación sigue una senda descendente decisiva antes de votar a favor de detener los aumentos de las tasas de interés.
En entrevista desde Cartagena, el codirector del Banco de la República Jaime Jaramillo dijo que la inflación tiene que llegar a un punto de inflexión, pero sostenido. Enfatizó además que le gustaría ver que la política fiscal va en la dirección correcta.
El aumento de los ingresos públicos será una señal de que la política fiscal está ayudando a frenar la presión inflacionaria, señaló, hablando al margen de una conferencia bancaria.
El mes pasado, Jaramillo y sus colegas de la junta de BanRep, integrada por siete miembros, frenaron el ritmo de endurecimiento monetario y señalaron que las alzas de tasas de interés están llegando a su fin a medida que se debilitan las perspectivas de crecimiento de la economía. Jaramillo dice que esto no significa necesariamente que el ciclo de aumentos haya terminado.
Aunque la tasa de interés real es positiva, lo que es necesario para que la inflación se desacelere, Jaramillo señaló que eso no significa que se vaya a parar ahí.
El banco también ha elevado los costos de endeudamiento para ayudar a apuntalar la moneda, aunque no tenga como objetivo un tipo de cambio específico, agregó.
Monedas de mercados emergentes
El peso colombiano se ha debilitado más de un 17% en el último año, el peor desempeño entre las principales divisas de mercados emergentes después del peso argentino y la lira turca. Las promesas del presidente Gustavo Petro de poner fin a los nuevos contratos de exploración petrolera y los cambios propuestos en el sistema de pensiones han puesto nerviosos a algunos inversionistas, contribuyendo a la venta masiva.
El mes pasado, el banco subió su tasa de interés oficial a un máximo de 23 años del 12,75%, desde el 1,75% en que se encontraba cuando los miembros de la junta del banco central empezaron a ajustar su política monetaria hace año y medio.
El Congreso aprobó el año pasado una reforma tributaria que busca generar unos US$4.000 millones en ingresos anuales adicionales para ayudar a financiar los planes de Petro de aumentar el gasto social y también mantener controlado el déficit fiscal. Los inversionistas están ahora a la espera de ver si parte del aumento de los ingresos se destinará efectivamente a recortar el déficit.
La inflación anual de Colombia se aceleró al 13,25% el mes pasado, su ritmo más rápido desde 1999, y muy por encima del rango meta del 2% al 4%.
Según Jaramillo, los datos recientes que apuntan a una desaceleración de la actividad económica pueden significar que la inflación alcanzará pronto el punto en que empiece a desacelerarse hacia su meta. En su opinión, es posible que se esté llegando a un punto de inflexión.
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