Bloomberg — Kim Jong Un, líder de Corea del Norte, exhibió sus últimas armas en un nuevo desfile: misiles de ataque rápido capaces de transportar una cabeza nuclear a EE.UU. y su primogénita, una hija preadolescente que le asegura la permanencia en el poder de esta dinastía fraguada durante la Guerra Fría.
Los medios de información gubernamentales facilitaron este jueves una serie de imágenes de un desfile bélico realizado en Pyongyang que mostró la mayor muestra de misiles balísticos intercontinentales desplegada por este país durante los diez años que Kim ha estado gobernando. Entre ellos figuraban 11 de sus cohetes Hwasong-17, considerado por los especialistas como el ICBM (por sus siglas en inglés, misil balístico intercontinental) de mayor tamaño del planeta capaz de desplazarse por carretera, y cinco cargadores para este tipo de misil de combustible sólido.
El despliegue del armamento y la exhibición de su hija, supuestamente llamada Ju Ae y con alrededor de 10 años de edad, lanzaron al exterior el mensaje de que de momento Corea del Norte no renunciará a su arsenal nuclear. Además, transmite a su población que el elevado precio del programa de armas atómicas para su economía lo justifica porque con ello salvaguarda a la futura generación de ciudadanos de Corea del Norte.
“La presencia de su hija en estos actos tan destacados hace pensar que el objetivo de Kim Jong Un es consolidar la estabilidad entre el plan de armamento nuclear de su país y la identidad y viabilidad de su estirpe”, señaló Soo Kim, antiguo analista sobre Corea de la CIA (por sus siglas en inglés) y ahora jefe del área de políticas de la consultora de gestión LMI, con sede en Estados Unidos.
Todos los misiles balísticos intercontinentales estaban en lanzadores móviles, y la mayoría de los de su tipo se exhibieron en un desfile. Esto aumenta sus posibilidades de un ataque que podría abrumar las defensas antimisiles estadounidenses. Los misiles de propulsor sólido serían más fáciles de mover y más rápidos de disparar que el actual arsenal de misiles balísticos intercontinentales de combustible líquido del estado, lo que le daría a Washington menos tiempo para derribar uno.
“El uso de un recipiente implica fuertemente un misil de combustible sólido, dado que estos se producen con combustible previo y requieren menos acceso”, dijo Joseph Dempsey, investigador asociado de defensa y análisis militar en el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos. “Por supuesto, al estar en un recipiente, no vemos el misil real asociado con este sistema y, para fines de desfile, es probable que esté vacío de todos modos”.
Corea del Norte ha estado trabajando en misiles de combustible sólido durante años y en los últimos meses probó nuevos motores, que podrían usarse en armas de largo alcance diseñadas para atacar bases militares estadounidenses en Japón y Guam, así como un misil balístico intercontinental para atacar Estados Unidos continental.
Pyongyang también parece estar trabajando en misiles balísticos basados en silos y misiles que pueden transportar múltiples ojivas, conocidos como vehículos de reentrada de múltiples objetivos independientes, o MIRV (por sus siglas en inglés), dijo Joost Oliemans, un experto en armas que es coautor del libro Las Fuerzas Armadas de Corea del Norte .
“Y lo que es más importante, no cabe duda de que Corea del Norte ha estado invirtiendo mucho en tecnologías MIRV y de señuelos, que pueden causar serios problemas a la Defensa Terrestre en curso medio de EE.UU.”, afirmó.
El Hwasong-17 está diseñado para transportar múltiples ojivas y Corea del Norte dijo que se probó con éxito el año pasado. La hija de Kim hizo su debut en los medios estatales en noviembre en una de estas pruebas, cuando tomó la mano de su padre y paseó por un misil balístico intercontinental antes de un lanzamiento.
Desde entonces, ha ocupado un lugar destacado en los medios estatales. En el desfile, entró del brazo de su padre mientras los soldados aplaudían. Luego se sentó en un asiento de honor para ver festividades que incluían paracaidistas con luces de neón que descendían a los terrenos y miles de militares a paso de ganso que gritaban alabanzas a Kim.
Los medios estatales ahora la llaman la “hija respetada” y las apariencias están alimentando la especulación de que está siendo preparada para un papel de liderazgo. En 2010, Kim Jong Un, entonces de 26 años, hizo su debut público en un desfile militar con su padre, Kim Jong Il.
Su asistencia ese día, más el hecho de que lo nombraron general de cuatro estrellas y le otorgaron puestos destacados en el partido gobernante unas semanas antes, fueron señales de que era el heredero aparente.
Es muy poco probable que Kim Jong Un instale a su hija en edad de ir a la escuela primaria en un puesto de gobierno ahora, una medida que casi le aseguraría el estatus oficial. Dada la edad relativamente joven de Kim de 39 años, podría estar en el poder durante décadas. Aun así, tiene sobrepeso y es un gran fumador que ha luchado contra problemas de salud, por lo que la sucesión es un tema de preocupación.
Rachel Minyoung Lee, gerente de asuntos regionales de Open Nuclear Network, con sede en Viena, dijo que las formas en que los medios estatales se han referido a Ju Ae a lo largo del tiempo son dignas de mención, pero es demasiado pronto para leer algo sobre la sucesión.
“En este punto, sigo siendo escéptico, solo porque la sucesión es un juego de poder brutal, uno que requiere mucho acto de equilibrio y, por lo tanto, un manejo cauteloso en los medios de Corea del Norte”, dijo Lee, quien agregó que las apariciones de Ju Ae tienen un poderoso efecto propagandístico en varios frentes, incluido el reforzamiento de la importancia del desarrollo y la producción de armas para la seguridad de las generaciones futuras.
La prominencia de Ju Ae es solo el último ejemplo de la voluntad de Kim de compartir el centro de atención con mujeres prominentes. Además de las frecuentes apariciones con su esposa, ha convertido a su hermana, Kim Yo Jong, en el rostro de los tratos del régimen con Estados Unidos y Corea del Sur. Recientemente, también nombró a Choe Son Hui la primera ministra de Relaciones Exteriores del país.
Duyeon Kim, miembro principal adjunto del Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense en Seúl, dijo que el nuevo papel que se le ha dado a la hija del líder puede ser parte de un juego de poder para mantenerlo bajo control.
“Kim Yo Jong había aparecido públicamente durante un tiempo, pero parece haberse desvanecido en un segundo plano más recientemente con el debut público de su hija”, dijo.
Desde que asumió el poder hace una década, Kim Jong Un ha desafiado las predicciones de que su régimen flaquearía.
La capacidad de Corea del Norte para lanzar un ataque nuclear ha crecido hasta el punto de que hay llamados para declarar a Pyongyang un estado con armas nucleares. El cambio conduciría a una renovación de una política de Estados Unidos de décadas destinada a evitar que eso suceda, mientras busca el final completo, verificable e irreversible de su arsenal atómico.
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